En el PRI “va a quedarse la cáscara… va a seguir ahí, sin contenido, vendiéndose al mejor postor”, coincide el historiador Lorenzo Meyer.
La politóloga Denise Dresser expuso que en una caricatura de la prensa se presenta al PRI como “el partido de las moscas, revoloteando en el cadáver que es el partido“.
Al hablar sobre la renovación de su dirigencia, en la Mesa Política de #AristeguiEnVivo, la doctora dijo que es “impactante pensar que este fue el partido que dominó la política mexicana por más de 70 años, que determinó la historia de México, concentró el poder, acuñó la corrupción, y hoy estamos hablando de un partido que probablemente va a desaparecer o volverse un minipartido muleta al estilo del Partido Verde”.
Señaló que hoy por hoy “no está peleando con el enemigo real que es la corrupción del partido”, sino que “sigue atrapado en una guerra intestina, los priistas se atacan los unos a los otros, no entienden lo que les pasó ni cómo recuperarse”.
“Están peleando por los retazos de ese partido que seguramente nunca volverá a ser lo que fue“, consideró.
“Su subsistencia estará en función de las alianzas que haga; lo que les ocurrió fue la presidencia de EPN, que según Labastida fue el peor presidente en la historia; Peña Nieto probablemente fue el que les dio el golpe de muerte… no van a poder recuperarse”, anticipó.
El futuro que le augura Dresser es “un éxodo cada vez mayor de priistas a Morena” y “una existencia simbólica que persistirá ahí en función de las alianzas que puedan crear en cada elección”.
Lorenzo Meyer recordó que “el PRI nunca luchó por el poder, se le dio, no tuvo que competir por él“, “y tuvo ese sello de nacer como partido procreado por el gobierno, en donde el dinero se le daba de entrada y ya luego venían los votos, y cuando no venían los votos se inventaba”.
“Cuando se le compara con el Partido Verde, este nació para engañar, para venderse, esclavo de quien tuviera el poder, el PRI no nació así, nació como el amo; ahora ya no tiene contenido, perdió la presidencia, perdió el rumbo, el país se fue por otro lado, va a quedarse la cáscara, lo cual implica tener algún dinerillo”, apuntó.
“La inercia va a llevarlo a seguir ahí en el panorama de los partidos pero va a ser una presencia muy lastimosa… la revolución ya se fue, ya desapareció hace mucho tiempo, el México de ahora ya no le pertenece a ese pasado que tuvo momentos importantísimos… el PRI ya no está para tranformar a nadie, está para el mejor de los casos para sobrevivir como una sociedad hueca… no creo que le extrañaríamos si desaparece, pero va a seguir ahí, sin contenido, vendiéndose al mejor postor, él que era el que compraba”, agregó.
Por otra parte, el académico Sergio Aguayo aseguró que es muy saludable que se haya recuperado la promesa de campaña de reducción del presupuesto de los partidos.
Espera que en las primeras semanas de septiembre se presente una iniciativa de ley al respecto y confió que se reforme la fórmula con la cual los partidos cada año obtienen más recursos.
Al respecto, Dresser indicó que Morena puede compensar la pérdida de financiamiento público con el acceso al presupuesto federal, por lo que con la reducción generalizada “puede haber un efecto contraproducente y perverso”.
“Pueden llevar a afianzar la presencia de Morena y reducir a la oposición”, dijo. Y recordó que AMLO llegó gracias a la competencia y a las luchas para nivelar el terreno de juego.