El periodista José Rubén Zamora salió este sábado de la cárcel militar Mariscal Zavala en Ciudad de Guatemala, después de obtener arresto domiciliario tras más de dos años aislado a la espera de un juicio por dos investigaciones distintas de la Fiscalía del país centroamericano.
El director de El Periódico abandonó la prisión acompañado de familiares y rodeado de ciudadanos y periodistas, a quienes agradeció por su apoyo durante los más de 800 días que estuvo encarcelado.
“Me siento extraordinariamente feliz y agradecido por el apoyo de ustedes y por las diferentes organizaciones nacionales e internacionales”, dijo a medios.
Zamora afirmó que desde la Fiscalía, quien lleva a cabo las investigaciones en su contra:
El Ministerio Público irá de nuevo detrás de mí y yo los esperaré en mi casa, y si me toca volver a prisión vendré con tranquilidad porque los casos carecen de sustento.
Y añadió: “Creo que ese tipo de acciones están acabando con ellos y no conmigo, porque tengo el espíritu, el coraje y la fe para seguir”.
Sus declaraciones se producen después de que un tribunal le concediera este viernes el arresto domiciliario, por lo que tendrá que presentarse cada ocho días ante la Fiscalía para el control biométrico.
Zamora tiene prohibido salir del país
Asimismo, la medida, adoptada por el juez Érick García, le prohíbe salir del país sin autorización judicial y comunicarse con otras personas vinculadas a la causa.
“La prisión preventiva del señor José Rubén Zamora Marroquín excedió los límites que establece la ley (…) y la inobservancia de esos plazos chocaría con lo establecido en la Convención Americana sobre los Derechos Humanos”, declaró el magistrado durante la audiencia del viernes.
Según un grupo de expertos independientes de Naciones Unidas, las condiciones soportadas en prisión por el periodista guatemalteco de 68 años sometido a más de dos a un confinamiento solitario “en una oscuridad casi constante”, pueden equivaler a tortura.
Zamora fue arrestado en julio de 2022 y condenado a seis años de prisión por un presunto lavado de dinero, al que se le sumaron cargos de obstrucción a la justicia y uso de documentos falsificados.
La Fiscalía presentó la primera de las acusaciones contra el exdirector de El Periódico, que cerró tras denunciar una “persecución” contra sus periodistas, apenas cinco días después de que lanzara críticas contra el entonces presidente, Alejandro Giammattei, por una gestión marcada por actos de corrupción. (Europa Press)
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