Medio centenar de camiones con ayuda humanitaria han llegado este miércoles a la zona norte de la Franja de Gaza, según las autoridades israelíes, que defienden su “compromiso” para que pueda seguir llegando esta asistencia un día después de que trascendiese una carta de Estados Unidos en la que advertía de un posible recorte en el envío de armas si no mejoraba la situación en el enclave palestino.
El convoy incluía “comida, agua, suministros médicos y refugio” proporcionado por Jordania y ha entrado en la Franja a través de dos de los pasos que conectan con Israel. “Toda la ayuda ha sido transferida después de profundas inspecciones de seguridad”, han explicado las Fuerzas de Defensa israelíes en un comunicado.
50 trucks carrying humanitarian aid—including food, water, medical supplies, and shelter equipment provided by Jordan—were transferred today to northern Gaza through the Allenby Bridge Crossing and the Erez West Crossing as part of the commitment to deliver humanitarian aid to… pic.twitter.com/X2p0FdaTWs
— Israel Defense Forces (@IDF) October 16, 2024
Las autoridades israelíes sostienen que buscan se cumpla el Derecho Internacional Humanitario y “facilitar” la entrada de ayuda, si bien desde el estallido del conflicto hace un año la situación humanitaria de la población gazatí no ha hecho más que empeorar y se mantiene el bloqueo del paso de Rafá, que conecta la Franja con Egipto.
Hoy se trasladaron a Gaza 50 camiones con ayuda humanitaria, incluidos alimentos, agua y suministros médicos, proporcionados por Jordania, como parte del compromiso de #Israel 🇮🇱 de entregar ayuda humanitaria.
Israel 🇮🇱 seguirá facilitando la entrada de ayuda humanitaria a Gaza pic.twitter.com/UsfVSOf3YO
— Embajador Gali Dagan (@galida12) October 16, 2024
La ONU denunció el pasado fin de semana que en todo el mes de octubre no había llegado “ninguna” ayuda alimentaria a la zona norte de Gaza, donde las fuerzas israelíes han recrudecido en los últimos días la ofensiva militar.
El Gobierno de Estados Unidos remitió el fin de semana una carta al Ejecutivo de Israel para pedirle expresamente que hiciera todo lo posible por mejorar la situación humanitaria en la Franja de Gaza en un plazo máximo de 30 días, sugiriendo que, de lo contrario, el envío de armamento podría estar en riesgo para evitar potenciales violaciones de las leyes norteamericanas.