La periodista denunció que el mismo día que retiraron una patrulla que vigilaba su casa, un grupo de sicarios entró a robar documentos sobre una investigación de pederastia relacionada con políticos y empresarios.
El día en que Lydia Cacho regresaba a casa, después de haber estado varios días fuera de la ciudad, el gobierno federal decidió retirar la patrulla que vigilaba su vivienda. Ese mismo día un grupo de sicarios entró a robar documentos sobre una investigación en curso sobre pornografía y pederastia relacionada con políticos, clérigos y empresarios mexicanos.
En entrevista para Aristegui en Vivo, la periodista denunció que, de manera sistemática, funcionarios de la Fiscalía General de la República y de la Secretaría de Gobernación filtran información que les proporciona, sobre sus actividades y su ubicación, a pesar de que tiene varias amenazas de muerte.
“En el momento en que yo había avisado a la FGR y a la Secretaría de Gobernación, a través del Mecanismo de Protección a Periodistas, que yo volvía a México y a mi casa ese día, ellos habían decidido que ya no podía tener protección y me la quitaron”.
Hace unos meses Cacho recibió una advertencia de un alto funcionario federal que le advertía que el exgobernador de Puebla implicado en la red de pederastia que denunció Cacho, Mario Marín, estaba oculto en México, y que tenía que tener mucho cuidado.
Esto, aunado a que este año jueces trasladaron a Succar Kuri de un penal de alta seguridad a una cárcel de Cancún, cerca de su domicilio.
“Yo tengo amenazas de muerte, explícitas, frente a los jueces, de Kamel Nacif, de Succar Kuri y de los policías sentenciados, esto lo saben todas las autoridades”
Aunque las autoridades tenían conocimiento de su situación de riesgo, decidieron retirarle la vigilancia policial.
Los hombres que irrumpieron a su domicilio extrajeron dos cámaras de video, un folder, 54 fotografías y 10 discos discos duros marcados con los nombres de Kamel Nacif, Succar Kuri, Mario Marín y Miguel Ángel Yunes Linares, así como de empresarios mexicanos que no puede mencionar por motivos de seguridad.
Todos ellos se relacionan con una investigación en curso sobre gran red de pornografía y pederastia clerical, política y empresarial actual.