¿Por qué el volumen de la televisión cambia según lo que esté viendo?

Seguro que en más de una ocasión os ha pasado que habéis estado viendo una película o un programa de televisión y de repente habéis notado que el volumen se subía repentinamente cuando llegaban los anuncios. O estáis viendo una serie o película en una plataforma streaming y tenéis que estar todo el rato subiendo y bajando el volumen en función de la escena que se esté emitiendo para saber qué dicen o no quedaros sordos con la música y explosiones. ¿Por qué el volumen cambia tanto en la televisión?.

¿Por qué el volumen de la televisión cambia dependiendo de lo que esté viendo?

La respuesta a la pregunta tiene mucho que ver no solo con la emisión en sí, sino también con el hecho de que tengamos un determinado televisor, o concretamente un sistema de audio que permita «equilibrar» el volumen para que no nos volvamos locos.

En el primer caso, el de la emisión en sí, es más que evidente que el volumen se sube como por arte de magia cuando se emiten anuncios. Es algo que ocurre siempre y en todos los televisores. ¿Pero por qué? Pues porque los anunciantes desean que el mensaje de lo que publicitan te llegue incluso si no estás mirando la televisión.

De ahí que tengamos que bajar el volumen de repente o de hecho apretar el botón de «mute» de nuestro mando a distancia si tenemos en cuenta el susto que nos podemos llevar cuando llegan los anuncios y de repente el volumen se dispara, algo que de hecho no debería pasar si tenemos en cuenta que en España esta situación está por lo visto regulada por la ley.

Según se dispone en el 14.2 de la Ley 7/2010 General de la Comunicación Audiovisual, que regula la emisión de publicidad en España:
“2. Tanto los mensajes publicitarios en televisión como la televenta deben estar claramente diferenciados de los programas mediante mecanismos acústicos y ópticos según los criterios generales establecidos por la autoridad audiovisual competente. El nivel sonoro de los mensajes publicitarios no puede ser superior al nivel medio del programa anterior. (…)».

Es decir que sí que está permitido que el volumen cambie para que sepamos que lo están emitiendo es un anuncio, pero nunca superar el nivel medio del sonido del programa anterior. De no cumplir dicha ley se puede llegar a pagar hasta medio millón de euros de multa pero lo cierto es que seguimos escuchando como las publicidades disparan el volumen, tal vez no tanto porque está subido, sino porque su calidad es mejor con respecto a la emisión que se esté ofreciendo.

¿Y qué pasa en las plataformas de streaming?

En cuanto a lo que ocurre con el volumen del televisor y plataformas como Netflix, HBO o Amazon es que nos tenemos que pasar todo el rato subiendo y bajando el volumen en función de si por ejemplo hay diálogos, explosiones, tiros, o música de fondo.

Todo sucede por una simple cuestión de que a pesar de que todas estas producciones están pensadas para ser emitidas por televisión (no ocurre como con las películas de cine que sí están pensadas para grandes salas donde se dispone del sonido envolvente que de alguna manera lo equilibra todo aunque en un televisor sea un «desastre»), lo cierto es que cuentan con un sistema de audio que sería mucho más apreciable si tuviéramos un buen home cinema instalado en casa. Un sistema de altavoces seguro mejoraría nuestra experiencia pero ¿Qué se puede hacer si no tengo más altavoces que los que incorpora el televisor?.

La solución al volumen del televisor

Desgraciadamente poco se puede hacer aunque en el caso de las plataformas, podemos elegir configurar el sonido de nuestro televisor de tal manera que podamos equilibrar un poco el volumen. Para ello puedes probar hacer alguna de estas cosas:

• Vete a la configuración del sonido de tu televisor y elige la mezcla estereofónica, 5.1.
• Selecciona el modo  «sonido optimizado» del televisor.
• Selecciona la opción «volumen automático» de modo que el volumen se regule dependiendo de cada emisión.
• Selecciona la opción «voces claras» que se incluye en algunos Smart TV.
• Selecciona la opción «reducir sonidos fuertes» que podemos encontrar en algunas plataformas.