El té es junto al café, una de las bebidas que más se consumen en el mundo (más de 6.300 millones de kilogramos al año), sin embargo no siempre lo degustamos con todas sus propiedades por el simple hecho de que no sabemos como conservarlo de forma correcta. De hecho al compra hojas de té natural podemos pensar que es en la nevera donde mejor se van a conservar y aunque esto puede ser verdad, es mejor que no lo hagamos ¿por qué? El motivo te lo explicamos a continuación.
Por qué no hay que guardar las hojas de té en la nevera
En la década de 1990, los arqueólogos excavaron la tumba del emperador Jing Di, quien gobernó durante la dinastía Han de China hasta su muerte en el 141 a. C. Pero no fue hasta 2016 que los avances tecnológicos permitieron a los científicos identificar parte de la materia orgánica encontrada en la tumba, y resulta que el Emperador era fanático del té; Se recuperaron de la tumba cogollos de té de 2150 años de antigüedad, lo que convierte al descubrimiento en el té más antiguo del mundo.
Probablemente no querrás preparar una taza de ese té hallado en la tumba de Jing Di, pero si eres fanático de esta bebida debes saber que aunque no parece que el té se estropee, en el sentido de ser dañino para el consumo, sí que pierde frescura, sabor, complejidad, dulzura e incluso antioxidantes a medida que envejece. Por lo tanto, el té debe almacenarse con cuidado. Entonces puede que te estés preguntando: Ya que el frigorífico mantiene frescos otros alimentos, ¿por qué no las hojas de té?
Las hojas de té absorben la humedad y los olores.
Según podemos leer en la página especializada Tea Epicure , el té es higroscópico, lo que significa que las hojas de té pueden absorber la humedad del aire. Debido a que es el contacto con el agua lo que hace que las hojas de té liberen sus aromas y sabores, es importante mantener las hojas secas hasta que esté listo para prepararlas. Podemos entender entonces que los frigoríficos son demasiado húmedos para mantener el té fresco. Aunque sean lugares frescos y oscuros (condiciones excelentes para el té), a humedad los hace menos que ideales para el almacenamiento de té.l
Además, otra razón para mantener las hojas de té fuera de la nevera es que el té puede absorber sabores y olores de otros alimentos. Dado que los frigoríficos contienen de todo, desde cebollas hasta restos de pizza (a menudo sin tapar), guardar té en la nevera podría terminar alterando el delicado sabor de las hojas. Entonces, ya sea que almacenes el té más caro del mundo, el té Da Hong Pao , que cuesta alrededor de 1,400 dólares por gramo, o tu Earl Grey favorito , la mejor manera de almacenar las hojas de té es en un recipiente hermético, lejos del calor, la humedad y la luz.
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