La pluma del pavo real es de gran belleza y una curiosidad de la naturaleza. El caso es que un nuevo estudio genético sobre los pavos reales ha descubierto que los característicos «ojos» tan llamativos que aparecen en estas aves y que utilizan en el cortejo, nos sugieren que evolucionaron de manera independiente en algunas ocasiones, según el estudio de la revista Proceedings of the Royal Society B.
Los pavos reales machos, que eran el ave simbólica de Hera, la esposa de Zeus en la antigua Grecia, son unas aves de gran tamaño bastante coloridas, con especial protagonismo del color azul y verde. Sorprenden por una cola que es el 60% del cuerpo del animal y donde sus tonalidades van del azul al dorado o rojo que los usan en los rituales de apareamiento y cortejo. La hembra no tiene este abanico de colores.
Estos «ojos», también los encontramos en dos géneros adicionales dentro de las Phasianidae, al que pertenecen los pavos reales: Polyplectron y Argusianus.
A causa de las variaciones en la evolución de todas ellas, los científicos han concluido que hay muchas ganancias y pérdidas de estos «ojos» durante la evolución de los pavos reales. Todo ello explica que el origen de los mismos se pudo deber a un cambio que no se ha producido en el género de las hembras.
Unos símbolos con mucha fuerza
Las plumas del pavo real cuentan con un significado en el que destaca la nobleza y la gloria, siendo una de las realezas más significativas del mundo de las aves. Estamos ante un animal que se alimento de plantas venenosas, sobreviviendo a ello.
No olvidemos que es un animal vanidoso que no tiene miedo a exhibirse para conseguir lo que desea, por lo que hay mucha gente que piensa que las plumas que tienen cuentan con un significado negativo.
Es evidente que existen en el reino animal muchas aves y animales en general preciosos, pero el pavo real es de una grandiosidad que pocos animales pueden llegar a igualar, eso sin duda.
Este animal ha sido tenido muy en cuenta por multitud de diseñadores que han llegado a basarse en ellos a la hora de hacer sus colecciones.
La naturaleza puede ser mágica y desde luego que a nivel de belleza, es justo calificar al pavo real como una de las criaturas más bellas del planeta, especialmente ese manto que nunca deja de sorprendernos cuando lo miramos con atención.
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