Si bien está claro que buena parte del cuerpo humano produce vello corporal, y que ya conocemos algunos de los motivos por los que estos pelos aparecen y se desarrollan en ciertas áreas concretas, tampoco podemos perder de vista que el pelo en las axilas son curiosos. Desempeñan un papel mucho más importante del que podríamos llegar a pensar de inicio.
Este vello que comienza a apreciarse durante la pubertad, esa etapa de la vida en la que se producen varios de los cambios que caracterizan el paso de la niñez a la adolescencia, es aún razón de curiosidad en los que atraviesan esta metamorfosis.
Características del pelo en las axilas
Posee algunas particularidades que permiten diferenciarlo de otros vellos. Clasificado como parte del pelo o vello terminal, viene a reemplazar al anterior, con algunas especificaciones como su gran cantidad de pigmento, un grosor que lo hace muy visible, y, finalmente, ese esparcimiento por todo el cuerpo dada su presencia en axilas, pubis cejas y pestañas, etc.
Por lo general, el vello axilar tiene dos y cinco centímetros de longitud, y no crece más que eso. Muchas veces se menciona como “pelo ambosexual”, ya que crece en personas de ambos sexos, aunque con mayor visibilidad en los hombres.
¿Por qué sale pelo en las axilas?
El vello de las axilas no es otra cosa que el resultado de la acción de los andrógenos en el organismo. Este grupo de hormonas, entre ellas la testosterona que no es exclusiva de los hombres como algunos piensan, genera cambios hormonales que hacen que dos años después del vello público, otro proceso clásico de esta etapa de la vida.
Este vello protege esa región de las temperaturas extremas a las que pudiera llegar a estar expuesto, frío o color, adaptándose al entorno para mantener el cuerpo sano y a salvo de esa sensación térmica. La concentración de pelos evita, asimismo, que el líquido del sudor acumulado gotee hacia abajo, como pasa en la espalda, lo que deriva en esa situación molesta e incómoda que seguro conoces.
Por este motivo muchas personas se afeitan las axilas, creyendo que así eliminarán el olor. Nada más lejos de la realidad, ya que el hedor de la transpiración tiene que ver con una higiene defectuosa y la acumulación de bacterias en esta zona, no con que haya vello local o no. Pues realmente su función es esa, entre otras.
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