El presidente criticó que en el pasado, varios gobernadores tuvieran la facultad de nombrar a los titulares de las fiscalías.
Al referirse a la situación de inseguridad que priva en Veracruz, el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que el problema fue heredado por las autoridades locales y federales que gobernaban anteriormente.
“Esto de Coatzacoalcos es un crimen dolorosísimo, algo horrendo, inhumano, algo que entristece. Nos degrada como sociedad, como gobierno, como país. Esto no se puede permitir y buscar la forma de que esto no se repita por todos los medios. Lo que sí es un hecho, es que hay un problema en Veracruz heredado por las autoridades anteriores, y no sólo por las autoridades locales, también por las autoridades federales”.
Durante la conferencia matutina, López Obrador afirmó que está preocupado por la herencia de inseguridad y violencia, y añadió “tenemos que entregar lo más pronto posible buenas cuentas”.
También criticó que en el pasado, a varios gobernadores se les otorgó la facultad para nombrar a los fiscales que “son inamovibles, pero no sólo eso, les dan 10 años y a veces hasta más”.
“Todo esto desde luego que genera conflictos, ha generado problemas, se tiene que ir resolviendo. Y el planteamiento nuestro es que trátese de quien se trate si hay contubernio con la delincuencia, se tiene que castigar”.
Al ser cuestionado sobre una posible investigación de la Fiscalía General de la República al fiscal de Veracruz, Jorge Winckler, el mandatario respondió que es probable que eso suceda, y urgió a que la FGR haga una investigación a fondo en la entidad.
“Hay dos cosas que se tienen que combatir: Una es la delincuencia, las conductas ilícitas, lo que tiene que ver con la actuación del crimen organizado. Pero otra, igual de importante, es el contubernio, yo les diría que eso es todavía peor, el que la delincuencia tenga el apoyo de la autoridad porque si no hay frontera entre delincuencia y autoridad, no se avanza”.
Tras la matanza en el bar Caballo Blanco, en Coatzacoalcos, el gobernador Cuitláhuac García y el fiscal general del estado, Jorge Winckler, reavivaron la pugna que hay entre ellos y se han enfrentado mediáticamente.
Todo empezó con la detención de Ricardo “N”, alias La Loca. El mandatario estatal afirmó que el probable autor material de la masacre había sido detenido en julio pasado, pero que la Fiscalía del estado lo había liberado y exigió que se investigara a Winckler.
La FGE rechazó las acusaciones y reveló que el presunto culpable material no había sido puesto a disposición de ellos, sino de la FGR, que fue la que lo liberó.
