“El ataque no provocado de Turquía tendrá un impacto negativo en nuestra lucha contra el ISIS y la estabilidad y paz que hemos conseguido en la zona en años recientes”, aseguraron en un comunicado las milicias kurdo-sirias, que se sienten traicionadas por EU
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo este martes que se encuentran en proceso de abandonar Siria, pero que no han abandonado a los kurdos.
“Puede que estemos en el proceso de abandonar Siria, pero de ninguna manera hemos abandonado a los kurdos, que son personas especiales y luchadores maravillosos”, señaló el mandatario estadounidense en una serie de tuits.
Apuntó que, del mismo modo, su relación con Turquía, parte de la OTAN y su socio comercial, ha sido muy buena.
“Turquía ya tiene una gran población kurda y entiende totalmente que si bien solo quedaban 50 soldados en esa sección de Siria, y han sido retirados, cualquier combate no forzado o innecesario por parte de Turquía será devastador para su economía y su moneda muy frágil. ¡Estamos ayudando a los kurdos financieramente / armas!”, continúo Trump.
….understands that while we only had 50 soldiers remaining in that section of Syria, and they have been removed, any unforced or unnecessary fighting by Turkey will be devastating to their economy and to their very fragile currency. We are helping the Kurds financially/weapons!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) October 8, 2019
Ayer las tropas estadounidenses comenzaron a retirarse del norte de Siria ante la amenaza de Turquía de una invasión militar contra las milicias kurdo-sirias al este del río Eufrates.
Según Reuters, camiones con bloques de concreto y excavadoras militares ingresaron a una base en la ciudad de Akcakale en la frontera sur de Turquía con Siria la tarde de este martes (hora local), mientras que soldados turcos llegaron en autobuses.
? | Gathering on the roads, the Turkish and Kurdish population of Sanliurfa on #Turkey‘s border with #Syria welcomed soldiers arriving in Akcakale for the upcoming offensive against the PKK/YPGpic.twitter.com/m4nFfHC9ck
— EHA News (@eha_news) October 8, 2019
El objetivo de la operación, según el mandatario turco, Recep Tayyip Erdogan, es “establecer la paz” mediante la expulsión de los combatientes de las Unidades de Protección Popular (YPG), consideradas “terroristas” por Ankara.
La decisión genera incertidumbre sobre el destino de Las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), dirigidas por la milicia kurda YPG, , quienes han sido hasta ahora aliados de Washington en la lucha contra el Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) en el norte de Siria.
Las FDS se sienten traicionadas por la actitud de Trump.
“Pese a todos nuestros esfuerzos para evitar el conflicto y nuestro compromiso respecto al mecanismo de seguridad, las fuerzas de EU no han asumido su responsabilidad y se han retirado de las zonas fronterizas con Turquía”, afirmó, en un comunicado, el comando general de la organización.
“El ataque no provocado de Turquía tendrá un impacto negativo en nuestra lucha contra el ISIS y la estabilidad y paz que hemos conseguido en la zona en años recientes. Como Fuerzas Democráticas Sirias, estamos determinados a defender nuestra tierra a toda costa”, se lee en el comunicado según RT.
(Con información de Agencias)