Retirar 13 mil pesos por cada trabajador que se quede sin empleo por la pandemia no afecta al sistema de ahorro, pero sí a la cuenta de los que tienen bajos ingresos, dice Bernardo González, presidente de la Amafore
La propuesta de cambiar la ley para que trabajadores que pierdan su empleo por la pandemia puedan retirar hasta 13 mil 307 pesos de su cuenta de retiro mejoraría, si en lugar de una cantidad fija cada trabajador puede disponer de un monto proporcional a lo que tiene ahorrado, dice Bernardo González, presidente de la Asociación Mexicana de Afores (AMAFORE).
El riesgo de establecer un monto fijo es que la cuenta de los trabajadores de menores ingresos o jóvenes que han acumulado poco ahorro puede quedarse sin recursos o con muy pocos, señala González en entrevista con Aristegui en vivo.
Añade que 70% de los trabajadores afiliados a SAR 97 (régimen de pensiones que aplica a trabajadores que empezaron a ahorrar para su retiro entre 1992 y 1997) perciben 4 salarios mínimos y en sus cuentas acumulan 40 mil pesos, por lo que retirar 13 mil 307 pesos ahora tendrá un efecto relevante en el largo plazo.
El miércoles, Mario Delgado, coordinador de Morena en la Cámara de Diputados presentó una iniciativa para reformar la Ley del Seguro Social y la Ley del Infonavit para permitir a los trabajadores que pierdan sus empleos por la pandemia puedan acceder a sus ahorros del fondo de retiro para hacer frente a sus gastos de la canasta básica sin descontarles las semanas de cotización.
La condición es que el trabajador haya perdido el empleo después de la declaratoria de emergencia del Consejo Nacional de Salubridad General, y el único requisito que contempla la iniciativa es que se acerquen al IMSS para solicitar este retiro parcial extraordinario, y las Afores tendrían que entregar los recursos, señala González.
De acuerdo con el diputado, la medida beneficiaría a los 500 mil trabajadores afiliados al IMSS que perdieron el empleo en abril y el monto acumulados de los retiros podría ascender a 7 mil millones de pesos, pero González estima que el número de trabajadores afectados puede ser tres veces más. “Es dramático, hemos estado haciendo estimaciones al cierre del mes pasado (mayo) y ya eran 1 millón de trabajadores, creemos que puede llegar a 1.5 millones”.
Pero aclaró que, de cualquier manera, los 7 mil millones de pesos a los que hace referencia la iniciativa representan alrededor de 0.18% de los de los recursos de Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR), por lo que en absoluto pone en riesgo a las administradoras, como se ha dicho, sino que lo preocupante es el efecto de los retiros en la cuenta individual de algunos trabajadores que tienen bajos salarios.
Méritos de la iniciativa y ajustes
A diferencia de un esquema que permitía con restricciones a quienes se quedaban sin empleo, tomar parte de sus ahorros, como esperar 46 días después de quedar desempleado y descontarles el número de semanas cotizadas a modo de penalización, la iniciativa presenta un mecanismo extraordinario para retirar recursos en caso de emergencia sin tener que esperar tantos días.
Tampoco sanciona el retiro extraordinario restándole al trabajador semanas cotizadas y, por otro lado, permite acceder por primera vez a la subcuenta de vivienda de los trabajadores en Infonavit. “El 18% de los trabajadores que tienen un crédito en Infonavit tienen ingresos mayores, así que está muy bien puedan acceder hoy en estas condiciones a parte de los recursos de su subcuenta de vivienda”, dijo González.
Pero el directivo considera que la iniciativa mejoraría si el monto que el trabajador puede retirar es proporcional al saldo acumulado de su cuenta, es decir, que tome en cuenta cuánto le falta para salir del sistema, así como al saldo inicial y su ingreso real, para que no afecte su retiro y no se genere un problema a futuro.
También está planteada una propuesta para que el gobierno analice alternativas para que, de manera solidaria, ayude al trabajador para que, posterior a la pandemia, se restituyan en la cuenta del trabajador los recursos retirados bajo la emergencia. “La propuesta es que se mandate (a las autoridades) a presentar un programa para lograr esa restitución, o algún incentivo o subsidio”.
González considera que hay posibilidades de que las propuestas de la AMAFORE sean tomadas en cuenta. “Tenemos una buena comunicación con Mario Delgado, hay mucha recepción a estas sugerencias”, afirma.