La crisis de COVID-19 está afectando todos los aspectos de la sociedad, incluida la forma en que trabajamos. En respuesta, muchas empresas están considerando pedirle a algún porcentaje de su fuerza laboral que trabaje de forma remota hasta que la crisis disminuya.
Si su organización no tiene mucha experiencia con el trabajo remoto, hay una serie de cosas clave en las que debe pensar al configurar un programa. Tendrá limitaciones de tiempo cuando se trata de promulgar un plan de acción, así que piense en formas de aprovechar las herramientas, los procedimientos y las tecnologías que ya tiene. No tendrá el lujo de realizar un estudio de seis meses.
Hablamos con algunas personas que han estado analizando el espacio de trabajo remoto durante más de una década y les preguntamos sobre los problemas que las empresas deben tener en cuenta cuando una gran cantidad de empleados de repente necesitan trabajar desde casa.
La disposición de la tierra
Alan Lepofsky, actual vicepresidente de Salesforce Quip, ha estudiado el mercado del trabajo remoto durante más de una década. Él dice que hay tres piezas principales para construir una estrategia de trabajo remoto. Primero, los gerentes deben evaluar qué herramientas usarán para permitir que los empleados continúen colaborando cuando no están juntos.
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