Durante el verano, el pelo sufre muchísimo por todas las agresiones a las que está expuesto: rayos solares, cloro de la piscina… Ahora que hemos vuelto a la rutina es un buen momento para hablar del bótox capilar.
Es un tratamiento a base de ingredientes naturales, como el colágeno o las vitaminas, que nutre e hidrata en profundidad el cabello, al tiempo que refuerza la fibra capilar y evita el encrespamiento. ¡100% recomendado para el cabello dañado!
¿Qué es el bótox capilar y cómo se aplica?
Aunque recibe este nombre, no contiene toxica botulínica, sino que se le conoce como bótox por su efecto rejuvenecedor del cabello. Es más, su aplicación se realiza a través de una inyección, sino como una mascarilla capilar.
Se trata de una mezcla de aminoácidos, vitaminas, ácido hialurónico, colágeno y proteínas. El bótox capilar se realiza en peluquerías especializadas, y los resultados son inmediatos.
En primer lugar, se lava el pelo con un champú alcalino, que elimina todos los residuos acumulados y abre la cutícula. Luego, se elimina el exceso de humedad y, a continuación, se aplica el producto de raíz a puntas.
Hay que dejarlo actuar durante 90 minutos. Una vez transcurrido el tiempo, se aclara con abundante agua fría para sellar la cutícula.
Para terminar, se sella el tratamiento con la plancha para que el producto penetre en la fibra capilar. Tiene una duración aproximada de dos meses. Para que los resultados duren más tiempo, es recomendable usar un champú sin sulfatos.
¿Cuáles son los beneficios?
Una de las principales ventajas que ofrece el bótox capilar es que es un tratamiento 100% natural, que no daña el cabello. ¡No tiene ninguna sustancia química! Por lo tanto, se puede aplicar en cualquier tipo de melena.
Además, hidrata y nutre el cabello en profundidad, aporta brillo, elimina el encrespamiento y repara el pelo dañado.
Tiene un efecto alisador muy similar al de la queratina, aunque sin sustancias químicas, así que es mucho menos agresivo. Por lo tanto, es mucho más recomendable para quienes suelen alisar su melena con frecuencia utilizando secadores o planchas, que resecan la fibra capilar.
En definitiva, el bótox capilar sirve para reestructurar el pelo, devolviéndole la salud y eliminando el encrespamiento. Repara las puntas abiertas, cierra las cutículas abiertas y recupera desde la parte más interna hasta la más externa, aportando densidad y facilitando el peinado.
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