El renting lleva años funcionando en el sector de los vehículos comerciales, y ahora promete hacerse un hueco en el mercado particular. Cada vez es más común encontrar en España empresas de renting que permiten a sus clientes alquilar un smartphone: Con la promesa de estrenar móvil con una barrera de precio mucho menor, los principios de este servicio son similares al de los coches o viviendas.
¿En qué consiste el renting de móviles?
Este servicio consiste en alquilar un teléfono móvil a través de una suscripción estipulada anteriormente (por lo general son 12 meses, aunque puede variar). Cuando finaliza el periodo, el arrendador puede continuar con el mismo móvil o cambiarlo por otro, prorrogando así un nuevo contrato de renting. Si el cliente desea finalizar el servicio, simplemente debe devolver el teléfono y dejar de abonar el renting.
¿Qué ventajas tiene el renting de smartphones?
- El coste para obtener un teléfono es muy reducido.
- Es más fácil obtener un móvil de alta gama, ya que las barreras de coste son más pequeñas.
- Te permite disfrutar el teléfono por el periodo que haga falta.
- Este servicio suele ocuparse de las averías del teléfono, incluso aunque los problemas no los cubra originalmente la garantía del móvil.
- El coste se mantiene durante toda la suscripción.
Las desventajas del renting en los smartphones
- El móvil no te pertenece, ya que la suscripción sólo da derecho al propio uso del teléfono.
- Si dejas de pagar, pierdes el teléfono y toda la inversión previa.
- Se debe cumplir las duraciones del contrato: no resulta posible deshacerse del teléfono si no cumple con las expectativas (existe el derecho al desistimiento durante los primeros 14 días).
- Los retrasos en los pagos suponen comisiones añadidas. Además, pueden suponer la retirada del teléfono y la obligación de pagar las cuotas pendientes.
- El seguro es siempre obligatorio.
Las operadoras se unen a esta moda
Además de las empresas destinadas específicamente a este servicio, las operadoras también lo ofrecen: Movistar ofrece dispositivos a los clientes de Fusión y miMovistar con precios que varían dependiendo de la tarifa seleccionada, con la opción de quedarse el dispositivo tras 48 meses y el pago de un euro. Por otro lado, Yoigo ofrece una opción bastante parecida con su formato leasing, aunque con dos años de contrato. El cliente paga a plazos su móvil y puede quedárselo al final del periodo si abona la parte que falta; con la opción de no pagar nada si devuelve el dispositivo.