En el año 1988, la Organización Mundial de la Salud (OMS) definió la prevención de la salud como las «medidas destinadas no solamente a prevenir la aparición de la enfermedad, tales como la reducción de factores de riesgo, sino también a detener su avance y atenuar sus consecuencias una vez establecidas». Por lo tanto, se entiende como tal al conjunto de medidas que previenen y detienen el avance de una determinada enfermedad.
Prevención de la salud: tipos
Existen tres tipos de prevención de la salud:
- Prevención primaria: engloba todas las actividades del ámbito sanitario orientadas a las personas sanas para impedir que adquieran la enfermedad, a través del control de los factores de riesgo. La OMS señala que la educación para la salud es clave ya que fomenta las actividades dirigidas a la mejora en la salud de las personas.
- Prevención secundaria: está orientada a detectar la enfermedad en etapas tempranas para actuar lo más rápido posible y retrasar el progreso de la misma. Las medidas se dirigen al diagnóstico y tratamiento precoz de la enfermedad. Un claro ejemplo son las campañas de cribado de cáncer de cérvix.
- Prevención terciaria: está encaminada hacia el tratamiento de la enfermedad, con el objetivo de reducir las secuelas o complicaciones. El propósito de la prevención terciaria es mejorar la calidad de vida de los pacientes, que se encuentran en pleno proceso de recuperación y rehabilitación de la enfermedad.
Principales amenazas de salud
Más del 70% de las muertes anuales en todo el mundo son causadas por enfermedades no transmisibles como el cáncer y la diabetes, así como por las enfermedades cardíacas. En términos absolutos, esto incluye a 41 millones de personas, de las que 15 millones son personas de entre 30 y 69 años.
Más del 85% de las muertes prematuras se producen en países subdesarrollados o en vías de desarrollo, y el incremento de las mismas se debe a los siguientes factores de riesgo: dietas poco saludables, contaminación del aire, alcoholismo, sedentarismo y tabaquismo.
Las principales causas de defunción a nivel global son:
- Cardiopatía isquémica
- Accidente cerebrovascular
- Enfermedad pulmonar obstructiva crónica
- Infecciones de las vías respiratorias inferiores
- Afecciones neonatales
- Cáncer de tráquea, pulmón y bronquios
- Enfermedad de alzheimer y otras demencias
- Enfermedades diarreicas
- Diabetes mellitus
- Nefropatías
La Organización Mundial de la Salud está trabajando para reducir el sedentarismo en un 15% para 2030 a través de diferentes acciones, como las herramientas de la política ACTIVA para que las personas estén más activas.
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