En un mundo cada vez más digitalizado en el que la tecnología ha tomado un rol fundamental en la vida de las personas, una nueva forma de violencia hacia las mujeres aparece con más frecuencia: la violencia digital.
El tema del Día Internacional de la Mujer 2023 propuesto por ONU Mujeres es “Por un mundo digital inclusivo: Innovación y tecnología para la igualdad de género”. En el que se busca visibilizar la violencia digital y proteger los derechos de las niñas y mujeres en los espacios digitales.
De acuerdo con ONU Mujeres, “la escala, la velocidad y la facilidad de comunicación por Internet, junto con el anonimato, seudonimato, la asequibilidad,la impunidad y la responsabilidad limitada” se vuelven componentes clave para la perpetuación de la violencia facilitada por las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).
Foto: Cuartoscuro
La falta de responsabilidad, aunado a que es una nueva forma de violencia, ha generado que en general, los medios de prevención y el marco legislativo para la violencia digital sean acotados.
De acuerdo con ONU Mujeres, México es uno de los países con mayor avance legislativo en la materia, en particular, por la Ley Olimpia que entró en vigor el 2 de junio de 2021.
La Ley Olimpia reconoce la violencia digital como un tipo de violencia en la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia en donde se señala que “ la violencia digital es toda acción dolosa realizada mediante el uso de tecnologías de la información y la comunicación” y tipifica el delito de la Violación a la Intimidad Sexual en el Código Penal Federal estableciendo una sanción que va de tres a seis años de prisión y una multa de quinientas a mil Unidades de Medida y Actualización.
De acuerdo a un estudio mundial realizado por ONU Mujeres, el 38% de las mujeres tienen experiencias personales de violencia en línea, mientras que el 85% de las mujeres que están en línea han sido testigos de la violencia digital hacía otras mujeres.
Además, la violencia facilitada por las TIC es más propensa en ciertas interseccionalidades como lo son las mujeres jóvenes, mujeres sobrevivientes de violencia física o sexual, mujeres defensoras o activistas, periodistas, integrantes de la comunidad LGTTBIQ+, pertenecientes a minorías étnicas, con discapacidad, entre otras.
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Existen muchos tipos de violencia digital, algunas de estas son:
–Ciberhostigamiento: la comisión reiterada por parte de una misma persona, de actos abusivos y perturbadores a través de las TIC.
–Ciberacoso: expresiones o comentarios discriminatorios y/o envío de materiales sexualmente explícitos no solicitados.
-Creación, difusión, publicación, distribución, intercambio, manipulación o almacenamiento de fotografías, vídeos o audios de naturaleza sexual o íntima sin consentimiento
–Ataques a la reputación o credibilidad: Implica la creación, manipulación y publicación de información personal falsa, manipulada o fuera de contexto con la intención de descalificar o dañar la reputación de una persona o que puede implicar un daño a su trayectoria, credibilidad, o imagen pública.
–Explotación sexual y/o trata de mujeres y niñas facilitada por las tecnologías: Esta forma de violencia conlleva la intermediación de las tecnologías para el ejercicio de poder sobre una víctima con el objeto de cometer abuso o explotación sexual de su imagen y/o de su cuerpo contra su voluntad.
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De acuerdo con ONU Mujeres, los principales retos para responder a la violencia digital son la normalización de la violencia digital por parte de los medios de comunicación, la baja representación de las mujeres en las TIC lo que representa desigualdad, impunidad por no dar una atención adecuada, culpabilización de las víctimas al haber un “juicio moral” marcado y la falta de mecanismos de denuncia y ausencia de esquemas de reparación de daños a las víctimas.
Para afrontar tales retos es necesario el reconocimiento y sensibilización del delito para lo que son necesarios datos y recursos económicos. También es esencial que existan programas de prevención y educación temprana a las niñas, niños y adolescentes.
Un pilar esencial y en el que se ha intentado trabajar es en el compromiso por parte de las empresas intermediarias de internet, los medios sociales y las empresas de medios de comunicación tradicionales, para que no sean cómplices de la violencia digital y al contrario, faciliten datos, proveen criterios claros para la atención de víctimas y garanticen la seguridad de las mujeres.
Foto: Cuartoscuro
¿Qué hacer si eres víctima de violencia digital?
Utiliza los mecanismos de denuncia de las plataformas para que cancelen las cuentas de los agresores
Si se filtra una imagen íntima tuya, solicita a los intermediarios de internet que la quiten de los resultados de búsquedas.
Además, ONU Mujeres provee de herramientas creadas por organismos internacionales, organizaciones civiles, colectivas feministas y por el Gobierno de México.
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