La vida de Pablo Urdangarin está cambiando por completo. Además de convertirse en uno de los royals más aclamados de la geografía nacional (y todo un fenómeno viral en la red), el hijo de la infanta Cristina está consiguiendo labrarse un futuro profesional de lo más prometedor en el mundo del balonmano, siguiendo así el legado de su padre. Tras pasar unos días en Marivent junto a doña Sofía, el catalán ha regresado a Barcelona para la presentación de la nueva temporada del Club Balonmano Granollers, haciendo oficial su incorporación al equipo.
Pablo Urdangarin en la presentación de Granollers / Gtres
Como ya acostumbra a hacer, con una sonrisa y mucha amabilidad, no ha dudado en atender a las cámaras de Gtres para revelar cuáles son sus ambiciones deportivas, qué espera de esta nueva etapa y, sobre todo, cómo se ha tomado su familia esta aventura que a él no le puede hacer más ilusión. Aunque ha querido mantener a sus padres en un segundo plano, no ha dudado en comentar que ambos están bien y afrontando este giro en su vida de la mejor manera. «Muy ilusionados. Los dos están muy contentos y muy felices por mí, saben que lo puedo hacer muy bien. Con que tenga su apoyo y su confianza todo va a salir bien», ha respondido con una sonrisa.
Pablo Urdangarin en la presentación de Granollers / Gtres
Siguiendo el legado de Iñaki Urdangarin, Pablo está dando pasos de gigante en el mundo del balonmano. Hasta tal punto que, incluso, se está especulando que podría recibir una llamada de la Selección, algo de lo que está seguro el ex duque de Palma. «Si él lo dice es porque lo ve, pero ya veremos», ha zanjado. Y es que, no hay mejor entrenador que alguien que ha triunfado en el deporte, motivo por el que el ex marido de la infanta Cristina no ha dudado en darle los consejos necesarios para que siga sus pasos, pero el más importante: «Que disfrute, que esté contento y haga lo que me gusta hacer».
Pablo Urdangarin en la presentación de Granollers / Gtres
Nuevos comienzos
Pablo Urdangarin se ha mostrado de lo más cercano en esta presentación, sumándose a la foto de equipo y participando en el acto. Comienza una nueva etapa para él, también a nivel personal, pues todas las miradas están puestas en el inminente divorcio de sus padres. Aunque el joven siempre ha querido dejar a su familia a un lado, se podría decir que ha encontrado en el balonmano su refugio después de un año complicado. Con más ganas que nunca, está dispuesto a dar lo mejor de sí mismo para quedarse en el equipo y cumplir su sueño: jugar con la Selección. «Creo que Granollers era de las mejores opciones y lo tenía bastante claro desde que hable con ellos y aquí estoy muy ilusionado», ha confesado.
Pablo Urdangarin en la presentación de Granollers / Gtres
Además, Urdangarin tiene claro que lo único que espera de esta temporada es dar lo mejor de sí mismo, apoyar a sus compañeros y, sobre todo, «hacer grandes cosas». Con este paso adelante, el nieto de don Juan Carlos se suma a las filas de un equipo joven, con muchas ganas y un futuro de lo más prometedor: «Todo se va encarrilando poco a poco». Parece que las rencillas familiares se van calmando, las diferencias entre sus padres van quedando en un segundo plano y todo vuelve a la normalidad.