“Voy a pedir información. Pero no queremos tener malos funcionarios, quienes vengan con malos antecedentes”, anunció el presidente.
Ramón García Gibson, exejecutivo de HSBC y quien actualmente ocupa un cargo en el Servicio de Administración Tributaria (SAT), no puede estar en el gobierno, señaló el presidente Andrés Manuel López Obrador tras la publicación de un reportaje menciona la relación de este personaje con un banco vinculado a investigaciones sobre lavado de dinero.
El pasado 21 de septiembre Quinto Elemento Lab publicó un texto que evidencia un expediente elaborado entre 2007 y 2012 por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), el cual muestra en más de 20 tomos con 10 mil hojas que la alta dirección de HSBC México incurrió en fallas consideradas graves.
Entre estas se encuentran la omisión deliberada de reportar operaciones sospechosas, el consentimiento del crecimiento exponencial del envío de dólares a granel en camiones blindados con destino a Estados Unidos, la dilación en la emisión de reportes de clientes con transacciones sospechosas e inusuales y la permanencia de posibles relaciones de negocios con personas, empresas y casas de cambio usadas por los narcotraficantes para adquirir aeronaves.
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“Voy a pedir información. Pero no queremos tener malos funcionarios, quienes vengan con malos antecedentes no queremos que trabajen en el gobierno”, sostuvo el primer mandatario en conferencia matutina.
No obstante, dijo que esto aún sucedía porque el gobierno es muy grande y cuesta moverlo y eso permite que se introduzca gente que no tiene buenos antecedentes y que no se portó bien en administraciones pasadas
“Por eso hablo del elefante reumático y mañoso que nos dejaron, además nos lo dejaron postrado, echado; y ya lo paramos, pero todavía falta que camine con prisa, si no corre, que camine, hay que estarlo empujando”, expuso.
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López Obrador refirió que seguirá purificando la vida pública para que en la 4T solo quede gente con convicción, honesta, y que le importe el negocio público, no el privado.
“Aquí se requiere mística. El que quiera hacer dinero que ponga su negocio, tiene toda la libertad para hacerlo, además es legítimo, pero el gobierno no es para hacer dinero, no es una máquina, una fábrica para producir ricos, como era antes, cada tres años, cada seis años nuevas camadas de ricos. Eso ya se terminó, aquí es para vivir en la justa medianía, lo que decía el presidente Juárez”, subrayó.