El primer ministro deja a un lado el optimismo del verano al anunciar medidas en principio para seis meses
El primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, anunció ante la Cámara de los Comunes un endurecimiento de las restricciones para hacer frente a la pandemia de coronavirus, admitiendo que el país está en un “peligroso punto de inflexión”.
Aseguró que es necesario actuar para contener el repunte de contagios que se ha venido registrando en estos últimos días.
Johnson admitió que es necesario un “delicado equilibrio” en el que por una parte se contemplen cuestiones de salud pública y, por otra, se garanticen los menores efectos posibles para una economía que arrastra los efectos de las sucesivas medidas adoptadas desde marzo, incluido un confinamiento nacional.
WATCH LIVE: Prime Minister @BorisJohnson makes a statement in the @HouseOfCommons https://t.co/jYSIvjtv4b
— UK Prime Minister (@10DowningStreet) September 22, 2020
El premier descartó un segundo confinamiento, pero advirtió de que los ingresos en hospitales ya se han duplicado. El lunes había mil 261 ingresados en Inglaterra, frente a los 782 de la semana previa, por lo que la situación solo puede ir a peor conforme avancen los meses y llegue el invierno.
En este sentido, aunque defendió la capacidad del sistema para aumentar el número de pruebas, señaló de que con esto solo no basta.
El discurso de Johnson ha ido variando en estas últimas semanas al tiempo que se ha reinvertido la curva de contagios, de nuevo al alza. Así, después de defender que septiembre sería el mes de la vuelta a las clases y a la oficina, ahora el primer ministro a exhortado a la población a seguir trabajando desde casa siempre que sea posible, según la BBC.
From 28 September people will be required by law to self-isolate, those breaking the rules face fines starting at £1,000, increasing up to £10,000.
A £500 Test & Trace Support payment will be available for those on lower incomes who can’t work from home.https://t.co/bNwkeYdWVf pic.twitter.com/0V9sEojjsI
— UK Prime Minister (@10DowningStreet) September 20, 2020
Los negocios, dijo, podrán seguir funcionando pero respetando nuevos protocolos, algo que se hará palpable por ejemplo en bares y restaurantes. Los establecimientos de hostelería deberán cerrar a las 22.00 horas y permitir únicamente servicio en mesa, mientras que el número de invitados a bodas cae a un máximo de 15.
“Lamento que vaya a afectar a muchos negocios que estaban empezando a remontar, pero tenemos que actuar“, justificó Johnson ante los diputados.
“Estamos adoptando medidas decisivas y apropiadas para salvar vidas mientras protegemos el empleo y los ingresos”, señaló en otro momento de su discurso.
No descarta nuevas medidas
Johnson prevé que las nuevas normas estén en vigor seis meses y dijo que “solo funcionarán si la gente cumple”, razón por la cual ha anunciado que se aumentarán las multas. Las autoridades castigarán con 200 libras a quienes no lleven mascarilla en los casos en que sea obligatoria y con 10.000 libras las violaciones de la cuarentena.
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Si todas estas acciones fracasan, no descarta ir más allá. “Nos reservamos el derecho a aplicar restricciones significativamente mayores“, dijo, confiado no obstante en que no será necesario si “el comportamiento cambia” en estas próximas semanas.
Reino Unido ha venido registrando en los últimos días entre 3 mil 500 y 4 mil nuevos casos diarios, pero los expertos del Gobierno británico ya avisaron el lunes de que, si avanza el crecimiento exponencial, a mediados de octubre podría haber hasta 50 mil positivos cada 24 horas.