Con la “operación Sálvenle el pellejo a Cienfuegos queda claro quién manda en México”, consideró Denise Dresser.
El hecho de que el presidente Andrés Manuel López Obrador no felicitara a Joe Biden nos iba a traer regalos importantes, “yo creo que es el caso” el retorno del general Salvador Cienfuegos -contra quien se retiraron cargos en EU-, “este es el primer regalo de Trump, por desgracia es un regalo envenenado”, consideró la escritora Sabina Berman.
En la mesa de este viernes, anotó que “el presidente sintió que ante los militares debía ceder” y “en el asunto del affaire Cienfuegos casi todos nos quemamos”.
“Sí creo en la intención de la sinceridad del presidente de barrer con la corrupción del Estado mexicano”, pero “no le está siendo fácil, es una lucha que se está topando con obstáculos muy pesados, uno de esos es el Ejército”.
“El presidente ha tenido temporalmente que retroceder y aceptar una derrota en su lucha contra la corrupción”, afirmó y dijo que es improbable que proceda una investigación contra el general en México.
“Yo creo que Cienfuegos no va a querer ir a Disneylandia otra vez, ni irá a EU en su vida”, remató.
Sálvenle el pellejo a Cienfuegos
Para la politóloga Denise Dresser en la “operación Sálvenle el pellejo a Cienfuegos queda claro quién manda en México”.
“Se asoma la verdadera correlación de fuerzas en el país, su retorno es una demostración del poder del Ejército”, sostuvo.
“Lo que vimos fue una negociación política de alto nivel fuera de la ley y sin precedentes en la relación bilateral”, acotó.
Para ella fue “un auténtico arreglo de cuates en el que no queda claro qué se dio”.
Opinó que las fuerzas armadas “presionaron al presidente” y lograron que “marche al ritmo que le tocan”.
Recordó que el actual mandatario “convirtió a los militares en un pilar de la cuarta transformación, cogobierna con ellos, los necesita”
Ante ello, el “presidente acabó atrapado entre el Ejército y EU, lo colocó en una de las situaciones más incómodas de su presidencia”.
No obstante que la negociación mostró que México “sí tiene dientes en la relación bilateral”.
“El juicio contra Cienfuegos en EU abría una caja de pandora muy grande”, indicó.
Pero Trump prefirió darle “en bandeja de plata a Cienfuegos”, “echándose encima a la DEA”.
“Fue un gran regalo de despedida”, coincidió la doctora con Berman, quien también comentó que no cree que en México se haga una investigación de lo que lo acusa EU.
“Quizá ocurra lo mismo que con Lozoya: mucho ruido y pocas nueces”, refirió.
Lo que se hizo fue “rescatar al aliado indispensable, porque amor con amor se paga”, concluyó Dresser.
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