Es el pintxo original, como el pecado. Aquel que inició la tradición y le dio nombre. Dicen que precisamente es el poeta el primero que da nombre a las cosas, pero no podemos asegurar que aquel donostiarra, Joaquín Aramburu alias Txepetxa, fuera más poeta que juglar al bautizar este pintxo que él mismo ensambló como “gilda” porque era “verde, salado y picante” como Rita Hayworth en la peli de Charles Vidor.
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Más recomendaciones ‘gilderas’
Si como Edorta Lamo no crees en las versiones de la gilda “porque para no superarla, mejor no hacer nada”, éstas de casco viejo y pan con aceite te devolverán a la época del cine clásico que inspiró su nombre:
- Bar Néstor. “Porque es casi un ritual tomarse una mientras se ultima la tortilla… o cuando te dicen que ya no queda”, confiesa Josema Azpeitia. De su tortilla ya os habló Jordi Luque aquí. Arrandegi Kalea, 11 (San Sebastián).
- Bar Txepetxa. La anchoa, aquí, no falla. La de las gildas tampoco. Eso sí, bien de piparra guipuzcoana. Arrandegi Kalea, 5 (San Sebastián).
- Bar Negresco. Un clásico con doble anchoa ganador de concursos de gildas en el que cuidan hasta el chorrito de aceite. Plaza Nueva, 10 (Bilbao).
- Bar La Catedral. Azpeitia nos cuenta que Marcos Milagro las borda. “Mimo y calidad absoluta”. Calle Carnicerías, 2 (Tudela, Navarra).
- Hermanos Vinagre. El que curen y encurtan ellos mismos los ingredientes de su gilda ha valido la recomendación María G. Aguado, periodista y reina del aperitivo madrileño: “Es la más cercana a la de ese norte que tanto echo de menos”. Calle de Narvaez, 58 (Madrid).
Y con los tiempos que corren, aquí van cinco para llevar, seas de donde seas:
- Zubelzu. Aquí lo que brillan son las piparras, el auténtico ‘langostino de Ibarra’. Precio: Tarro de 96 gramos escurridos, 5,25 euros en Carrefour y 5,50 euros El Corte Inglés y tiendas delicatessen.
- Casa Santoña. Piparra de Ibarra y anchoas elaboradas de manera artesanal. Precio: 14,90 euros el envase de 20 piezas de gildas de anchoa extra del Cantábrico en su tienda online.
- La Gilda del Norte. La auténtica (de Bilbao). Precio: Tarro de 350 gramos escurridos, 10 euros. En sus Gildatokis y en su tienda online.
- Doña Tomasa. La conservera cántabra no ha fallado durante la cuarentena, algo de lo que ha disfrutado la gastrónoma y ex bulliniana Claudia González. Si lo dice, es porque lo sabe. Precio: en su tienda online las seis unidades salen por 6,50 euros. También en tiendas gourmet.
- Bombas Lagartos y Cohetes. el pelotazo del mercado de Vallecas cuida sus ingredientes y los ensambla cada día. Precio: las ocho unidades salen a 12,50 euros en su tienda online y en su puesto del mercado Villa de Vallecas.
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