Hace un año que Rita Moreno confesó que “creció pensando que no valía mucho”, con motivo del estreno de Rita Moreno: Just a girl who decided to go for it (“Rita Moreno: solo una chica que decidió ir a por todas”). Su infancia y madurez estuvieron marcadas por el racismo de la época, el machismo y la pobreza. De esta última se pudo librar gracias a que su esfuerzo la llevó a participar en la producción de Hollywood West Side Story. Sin embargo, el trato machista siguió teniendo un papel en su vida al conocer al actor Marlon Brando, cuando ella tenía 22 años, en el set de la película biográfica sobre Napoleón Désirée, y con quien mantuvo una relación tan tóxica que la hizo llegar a su límite. “Intenté acabar con mi vida tras ser maltratada por él. Y es que yo no entendía nada. Quería matar a esa patética, triste y pisoteada Rita. Pero solo fue eso. Se quedó en un intento”, ha admitido ahora en una entrevista para Variety junto a la actriz Jessica Chastain.
“Era muy emocionante estar con Marlon”, ha asegurado Moreno. “Era extraordinario en muchos, muchos sentidos, pero era un mal hombre. Era un mal hombre cuando se trataba de mujeres”, ha apuntado la puertorriqueña, que ya contó el pasado diciembre en una charla en el programa estadounidense The View que las infidelidades por parte del actor se convirtieron en rutina para ella.
Más información
Esta vez la actriz de 90 años ha explicado que él intentaba esconder su condición de “mujeriego”, pero que siempre terminaba confesando a Moreno todas esas relaciones externas a la pareja que mantenía. “Cada vez que me mentía, yo lo miraba y le decía: ‘Marlon, mírame’. Y él comenzaba a esbozar, no quiero usar una mala palabra, esa sonrisa”, ha recordado la intérprete. “Podía leerlo como un libro. Por eso me amaba y me maltrataba de tantas maneras”. Un trato que la llevó al cansancio vital y a querer desaparecer. “Intenté acabar con mi vida con pastillas en su casa. Así es como traté de hacerlo”, ha confesado.
Tras la ruptura, Moreno y Brando volvieron a trabajar juntos en La noche del día siguiente (1969), una situación que él aprovechó para intentar reanudar su romance. La actriz, por su parte, ya estaba casada con el cardiólogo Leonard Gordon, con quien tuvo a su única hija, Fernanda, y no cedió a su petición. Ha recalcado que él “había cambiado mucho”. “Había perdido una gran parte de sí mismo, creo. Su parte buena, la del Marlon bueno al que amaba Rita. Era muy complicado. Muy, muy complicado”, se ha lamentado la puertorriqueña, que ha reconocido que lo que le mantuvo tanto tiempo junto a Brando fue que “él era el rey de las películas. Era realmente uno de los hombres más sexuales de la Tierra. Fue una de esas aventuras amorosas muy tempestuosas”. Una aventura que llegó a su fin tras ocho años de largo sufrimiento.
La actriz volvió a las pantallas a finales de 2021 por su participación en la nueva versión de West Side Story de Steven Spielberg, donde se aplicaron cambios relevantes. Semanas antes del estreno el pasado diciembre, Moreno recordó el enfado que le provocaba la falta de diversidad de aquel primer rodaje a inicios de los años sesenta. Muchos de los actores eran maquillados con betún color tabaco, algo que le parecía un despropósito porque no representaba las tonalidades de piel de una isla rica en herencias españolas, de indígenas taínos, negros y holandeses. Aunque la cinta original fue alabada por la prensa, la puertorriqueña ha llegado a afirmar que nunca estuvo de acuerdo con las críticas.
Source link