La alergía al frío, del mismo modo que la alergia a la lluvia, es una enfermedad considerada rara, que muy pocas personas sufren en todo el mundo. Sin embargo, quienes la sufren tienen muchas limitaciones en los meses de invierno. Los síntomas más frecuentes de esta patología son dolor de cabeza y picor en las manos, la cara y el cuello; las zonas más expuestas.
¿Qué es la alergia al frío?
La enfermedad también recibe el nombre de urticaria a frigore, y el principal síntoma es la urticaria en las zonas más expuestas: manos, cara y cuello. Aunque por lo general se da en jóvenes, es una patología que puede afectar a personas de todas las edades.
¿Cómo se dan los síntomas de la enfermedad? No tiene por qué hacer necesariamente frío. Incluso el consumo de bebidas frías, como un granizado en pleno mes de agosto, puede desencadenar una reacción anormal del organismo.
Por lo tanto, es suficiente el contacto con un cubo de agua muy fría o un simple cubito de hielo para que las ronchas de color rojo hagan acto de aparición en la piel. Incluso hay quienes sufren los síntomas al salir de la ducha por el cambio brusco de temperatura.
En algunos casos los pacientes presentan la urticaria en una determinada zona del cuerpo; aquella que ha estado en contacto con el frío. Mientras, hay otros en los que aparece de manera más generalizada.
Así, a pesar de ser una enfermedad que muy pocas personas sufren en todo el mundo, éstas se encuentran con grandes limitaciones en su día a día.
Sobre las causas de la alergia al frío, no se conocen con exactitud. Los científicos creen que tiene está relacionada con la genética.
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