Por Redacción
Querétaro, 20 febrero de 2020.-Quienes a diario tratan con él, denuncian que el Director de la Defensoría de Oficio del gobierno de Querétaro, es un funcionario, altanero, prepotente y autoritario, quien a cualquier hora del día se le antoja pedir informes de X caso, para Salvador Arvizu Galván no hay quien le ponga un freno a su despotismo, ya que hostiga constantemente a sus trabajadores, llegando incluso a la explotación laboral.
Uno de los últimos casos de despido injustificado fue cuando el Director de la Defensoría de Oficio de Gobierno estatal Salvador Arvizu despidió de manea injusta al defensor Javier Martínez López quien no conforme con armarle todo un “teatro” lo humilló y lo acusó injustamente de robarse “un celular”, incluso se atrevió a hablar a la policía poniendo en el “ojo del huracán” a una institución como lo es la Defensoría de Oficio.
El funcionario en cuestión, hostiga trabajadores, los obliga a trabajar en días no laborales y festivos, a él no le importa el tiempo de sus empleados, pero lo más grave es que pide a sus súbditos informes de expedientes de hasta 2000 copias, pero no otorga los recursos económicos ya cuando menos para tonner, pero no conforme con ello exige a los empleados a asistir a los eventos de sus “jefes” el gobernador del estado y del Secretario de Gobierno, so pena de que si no asisten se les descontará su día, es decir, parte de su sueldo.
En el caso del defensor de oficio despedido, Salvador Arvizu no cumplió con los procedimientos administrativos, como el de iniciar investigación interna, sino que tal parece que pretendió poner “un cuatro” al funcionario acusándolo de robarse un celular y lo más peor fue que habló a la policía, olvidando y sin agotar los recursos internos de una acta administrativa.
Salvador Arvizu está violando los derechos de la clase trabajadora al atentar contra la norma 35 de la Ley Laboral en la que habla de que los jefes no deben someter a estrés a los trabajadores, “el dirá el que no quiera trabajar que se vaya” pero ese no es el caso” dijo uno de los Defensores de Oficio que denunció hostigamiento laboral y que omitió su nombre por temor a represalias, pero obra en poder su nombre para cualquier aclaración al respecto.
Es urgente y necesario que el Director de Defensoría de Oficio sea llamado a cuentas por sus jefes ya que también hay cierto favoritismo hacia algunos abogados litigantes subrogados a los que se les está otorgando casi 35 mil pesos por asistir solamente a una audiencia de juicio abreviado, caso de corrupción en el que se tocará en otra ocasión el tema.
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