Denise Dresser calificó como buena a la Ley de Amnistía que propuso López Obrador al Congreso, ya que sacará de la cárcel “a quienes han padecido las penurias, los errores e injusticia de nuestro pésimo sistema penal”.
Para el analista político, Sergio Aguayo, el aspecto más polémico de la Ley de Amnistía que presentó el domingo el presidente Andrés Manuel López Obrador tiene que ver con el punto número dos, el cual se refiere a las personas que han sembrado, distribuido o vendido narcóticos, ya que aunque no ha sido declarada, es evidente que estamos en medio de un guerra, que en algunos estados es de baja intensidad y en otros de alta intensidad.
Consideró que al momento de discutir esta ley, los legisladores deben tomar en cuenta dos cosas: la primera tiene que ver con complementar la legislación con un beneficio que ya aparece en la Ley General de Víctimas, el cual tiene que ver con otorgar un privilegio a quienes están encarcelados, siempre y cuando proporcionen información sobre el paradero de desaparecidos o información sobre la lógica de la masacre.
“Me parece que la Fiscalía General de la República (FGR), la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) y todo el gabinete de seguridad se beneficiaría si se incluyera como una de las condiciones que quienes vayan a ser liberados proporcionen información sobre las redes que los metieron a cometer el delito porque es una extraordinaria oportunidad para mejorar la calidad de la inteligencia que lleva a combatir a las bandas del crimen organizado”, planteó.
El segundo aspecto que para Sergio Aguayo resalta en esta iniciativa presidencial es la necesidad de entender que quienes vayan a ser liberados por delitos relativamente menores corren el riesgo de ser asesinados al momento que lleguen a sus lugares de origen “porque en el trasfondo, la amnistía a los delincuentes menores no toma en cuenta la guerra sin cuartel que se libra en las comunidades y que una de las causales para la pena de muerte o la ejecución, es la traición”.
Señaló que si no se toman las medidas para darles algún tipo de protección o de reubicación, simplemente se estará liberando a personas para que posiblemente sean ejecutadas.
“Es un tema complejo e inédito porque una amnistía a militantes del crimen organizado que enzarzaron una guerra entre sí y contra el Estado, no va a ser ni tan sencillo ni tan simple como liberar a los indígenas que no tuvieron acceso a sus lenguas durante sus juicios”, consideró.
Por su parte, Denise Dresser expresó que la propuesta de López Obrador es buena porque sacará de la cárcel a los vulnerables, a los pobres, a los injustamente acusados, “a quienes han padecido las penurias, los errores e injusticia de nuestro pésimo sistema penal”.
Ejemplificó con el caso de las mujeres que han abortado y lo que provocó que en Ciudad de México esta acción no fuera penalizada: “llevó a la criminalización del aborto en 17 estados que de pronto incorporaron el derecho a la vida desde la concepción a sus Constituciones locales; eso ha llevado al encarcelamiento injusto de muchas mujeres que ahora serán liberadas”.
La politóloga vio con buenos ojos que también la iniciativa sume a los indígenas, así como a los jóvenes extorsionados y presionados para participar en el narcomenudeo, ya que dijo, “suelen ser una parte de la población más vulnerable por no contar con los recursos para llevar a cabo sus procesos”.
“Esto se asemeja a iniciativas que ya se dieron en varios estados de Estados Unidos donde se ha despenalizado la marihuana para uso recreativo y/o medicinal. Sacar de la cárcel a personas que han traficado con pequeñas porciones de marihuana es consistente con esta propuesta de despenalizar la marihuana en este sexenio”.
No obstante, manifestó que aunque esta es la cara amable y progresista del gobierno de la Cuarta Transformación, esta choca con la ampliación del catálogo de delitos que el propio gobierno federal propuso para justificar la prisión preventiva oficiosa.
“Eso es puro populismo penal, es autoritarismo disfrazado de progresismo. Por un lado se va a sacar de la cárcel a los vulnerables e injustamente acusados, y por otro lado se van a llenar las cárceles por injustamente acusados que están en prisión mientras se llevan a cabo sus procesos”, finalizó.
Este domingo, el presidente López Obrador envió a los legisladores de la bancada mayoritaria de Morena, en la Cámara de Diputados, la iniciativa para expedir una ley que permita otorgar amnistía a personas que hayan cometido cierto tipo de delitos y para aquellos que puedan ser considerados presos políticos en cualquier parte de la República.
El coordinador parlamentario de Morena, Mario Delgado, dio a conocer que el documento recibido tiene como propósito fundamental, liberar a presos que se encuentren en la cárcel por causas específicas que quedarían descritas en esa legislación. Sería el caso de jóvenes encarcelados por consumo de drogas o por haber participado en actividades de narcomenudeo o bien mujeres que fueron sometidas a prisión por realizarse un aborto.
La Ley de Amnistía, explicó el líder morenista, no aplicaría para delitos como homicidio, secuestro, delitos cometidos con armas de fuego, reincidentes y, en general, aquellos que hayan cometido delitos graves contemplados en el artículo 19 de la Constitución. La iniciativa solo contempla la posibilidad de liberar a personas que hayan cometido delitos menores.
