Las vacunas contra el coronavirus son la gran esperanza de la humanidad para que la vida vuelva a ser tal y como la conocíamos antes de que se declarara la enfermedad como pandemia el pasado marzo de 2020. En los países más desarrollados la vacunación lleva un ritmo que cada vez va a más, así que este verano podríamos estar hablando de llevar una cierta vida normal.
Aunque son la gran esperanza, como todas las vacunas, las del coronavirus no están exentas de efectos secundarios. Los normales suelen ser los propios de otras vacunas como fiebre, dolor de cuerpo o malestar durante un días o un par de días aproximadamente. Pero estas vacunas también tienen una serie de efectos severos que vienen indicados en el prospecto que quizás no hemos llegado a ver.
Dolor en extremidad y reacciones
Que nos duela la zona del brazo donde recibimos la vacuna de coronavirus es normal. Pero no sería normal, y podría tratarse de un efecto severo indicado en el prospecto, dolores en la extremidad que se van extendiendo por todo el brazo.
Según reza en el indicativo de vacunas como Pfizer, algunos vacunados pueden sentir este dolor por todo el brazo durante un periodo prolongado de tiempo más de lo habitual.
Además, en vacunas como la de Moderna, se indica que los pacientes podrían tener una reacción alérgica que puede aparecer hasta siete días después de haber recibido la dosis.
Parálisis facial periférica
A pesar de que se han dado en casos reducidos a nivel global, se trata de uno de los efectos secundarios más severos que pueden aparecer con la vacuna. Se trata del conocido como parálisis de Bell, que genera una parálisis de músculos faciales de causa desconocida, por un tiempo determinado.
En algunos vacunados llegaron a aparecer hasta 37 días después de la toma de la vacuna.
Linfadenopatía
Los inmunizados con la vacuna de Moderna notificaron reacciones relacionadas con los ganglios linfáticos, según la EMA. En vacunados con AstraZeneca se han notificado 1 por cada 1.000 casos. Según los técnicos, se suele localizar en la axila del brazo donde el paciente recibe su dosis.
Hinchazón facial
Se trata de un nuevo síntoma que ha descubierto la EMA en las últimas semanas con vacunas como la de Pfizer. Podría tener relación con las vacunas que utilizan el ARN mensajero para tratar el coronavirus, también se han dado casos en las de Moderna.
Por el momento son pocas las personas que han sufrido este efecto, y todas relacionadas con inyecciones de rellenos dérmicos en su piel.
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