Hace un mes que Sergio Ramos y Pilar Rubio le daban la bienvenida a su hijo Máximo Adriano y, aunque los casos por coronavirus están aumentando a diario, no han querido renunciar a disfrutar de unos días de vacaciones en este verano tan atípico para todos. Cumpliendo con las medidas de seguridad recomendadas, el deportista y su mujer ponían rumbo a Palma de Mallorca junto a sus cuatro hijos hace tres días para empezar los que están siendo unos días inolvidables. Pero también incansables ya que el madridista y la presentadora no han parado en estas horas que llevan instalados en la isla. Piscina, jornadas en alta mar, deportes acuáticos son las actividades en las que están ocupando estos días de relax.
Pero Ramos no se olvida de los suyos. Es un hombre familiar y muy apegado a los suyos y durante este viaje a Mallorca no se ha olvidado de visitar a un gran amigo como es Rafa Nadal. Ha sido gracias a sus redes sociales como hemos sabido que el de Camas ha pasado por la Academia de Rafa Nadal en Manacor, y lo ha hecho junto a Pilar y sus tres hijos mayores. Durante unas horas la familia dejó el barco en el que se les ha visto navegar para ir hasta Manacor, tierra natal del tenista y donde está ubicada su escuela.
Allí recorrieron las enormes instalaciones del centro que dirige el manacorí, entre ellas el enorme museo en el que están expuestos los distintos trofeos que ha ganado el tenista, y donde está incluida una réplica de una Champions conseguida por el Real Madrid. Los dos se han dedicado sendos mensajes de cariño y admiración en sus perfiles de Instagram, dejando constancia de esta visita tan importante para los dos. «¡Número 1! Siempre es un placer visitar a un gran amigo, gran deportista y gran madridista. Gracias por tu cariño», ha escrito Ramos acompañando este post junto a varias imágenes junto a sus hijos y su mujer posando con Rafa. Un mensaje al que correspondió el tenista dándole las gracias por su visita, y haciendo un guiño a la última fotografía en la que posan con la copa del equipo de Chamartín.
En las fotografías posan todos sonrientes en el museo de Rafa Nadal, sin duda una instantánea inolvidable para todos, pero especialmente para los hijos del futbolista, felices de compartir unas horas con sus padres y uno de los mejores deportistas de los últimos tiempos. Este está siendo un verano muy especial para el matrimonio que hace unos días celebraba ocho años del comienzo de su historia de amor que puso el broche de oro el pasado 26 de julio con el nacimiento de su cuarto bebé.