Parece que la ruptura entre Shakira y Piqué está siendo de todo menos pacífica. No está prevista ni una reconciliación ni segundas oportunidades a corto plazo, sino todo lo contrario. En esta nueva etapa de su vida, la de Barranquilla habría tomado varias decisiones para poner tierra de por medio con Piqué, empezando por su casa. Si hace unos días se conocía que el futbolista se había cambiado de domicilio, ahora se ha podido saber que la cantante estaría planeando blindar su intimidad, levantando así muros contra sus suegros.
En el último videopodcast de Mamarazzis, Laura Fa y Lorena Vázquez han comunicado que la intérprete de Una loba en el armario planea reformas en su nidito de amor, pues la mansión cuenta con una casa principal y dos aledañas, en las que están instalados los Mebarak y los Piqué. El motivo sería la tensa relación de la artista con sus exsuegros, por lo que levantar muros sería la solución para no cruzarse con ellos en estos momentos tan complicados.
“Es un recinto muy grande. No debe ser muy agradable encontrarse con tus exsuegros cuando la relación con su expareja no pasa por sus mejores momentos. Hay tensión y frialdad”, han asegurado las periodistas. Por el momento, ni la intérprete de Waka waka ni el jugador del FC Barcelona se han pronunciado al respecto, dejando la puerta abierta a una infinidad de especulaciones sobre el futuro de uno de los tándem más consolidados de todos los tiempos.
El pasado 4 de junio, Shakira y Piqué anunciaron su separación a golpe de comunicado: “Lamentamos confirmar que nos estamos separando. Por el bienestar de nuestros niños, que son nuestra máxima prioridad, pedimos respeto a la privacidad”. Durante 12 años, la artista y el futbolista mostraron sin tapujos su complicidad y su amor, convirtiéndose en una de las parejas más aclamadas y consolidadas del panorama mundial. Sin embargo, todo se truncó hace apenas unas semanas, cuando unos presuntos rumores sobre una infidelidad por parte del catalán comenzaron a sonar con fuerza en los medios de comunicación. Tras mucho especular, la pareja quiso dar un paso al frente y confirmar que habían puesto punto y final a su historia de amor. Desde entonces, muchos han sido los cambios a los que han tenido que hacer frente, volcándose por completo en los dos pilares fundamentales de su vida, Sasha y Milán.
Ahora, con la noticia aún muy reciente, han comenzado a salir a la luz los primeros cambios de la relación. Mientras unos rumores apuntan a unas posibles reformas en el terreno que la pareja comparte con la familia de ambos, otros medios informan sobre un cambio de residencia de la cantante. Al parecer, varias fuentes han apuntado que las intenciones de Shakira serían instalarse una temporada en Miami con sus hijos. Allí, la intérprete de Chantaje cuenta con una mansión ubicada en el barrio residencial de North Bay Road Drive, una exclusiva zona donde se encuentran las casas de personalidades como Jennifer López o Julio Iglesias, entre otros.
Shakira se compró este inmueble en 2001, al poco tiempo de iniciar una relación con Antonio de la Rua. Por aquel entonces, la cantante pagó 2,8 millones de euros y, meses después, la reformó para ponerla a la venta en 2018 por casi 10 millones de euros, aunque hace tan solo unos meses la quitó del mercado. La impresionante mansión de 900 metros cuadrados cuenta con seis habitaciones, siete baños, sala de juegos, piscina, gimnasio y spa. Un hogar ideal para comenzar una nueva vida, aunque el plan no sería a corto plazo, pues todavía quedan muchos flecos que pulir en su separación.
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