La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo reprobó este martes en la mañanera los hechos de violencia que se vivieron ayer en el Congreso de la Ciudad de México, donde se registraron encontronazos violentos entre sus integrantes.
La tarde del lunes, legisladoras y legisladores capitalinos se enfrascaron en una batalla campal durante el debate para reformar el órgano de transparencia de la capital.
Diputados y diputadas de oposición decidieron tomar la tribuna para detener el proceso, ante lo que consideran un retroceso para la transparencia, un hecho que desato un intercambio de codazos y jalones de pelo.
Estos desafortunados hechos quedaron registrados en video, y rápidamente se posicionaron entre las tendencias en redes sociales.
A pregunta expresa sobre lo sucedido, la mandataria aseguró que “muy mal” que una sesión de discusión democrática terminará en hechos violentos.
Está mal eso, que se llegue a este espectáculo que se dio ayer la verdad, un llamado a todos los diputados y diputadas de todos los grupos […] No debe ocurrir esto.
Con ello la mandataria afirmó que el debate es valido, incluso aseverando que “se puede tomar la tribuna” como su movimiento realizó al ser de oposición, pero que nunca se debe llegar a la violencia como ayer.
Morena, en solitario logra su reforma
Minutos después de la gresca, los legisladores de Morena retomaron el control de las instalaciones y continuaron con la sesión.
Los legisladores de oposición denunciaron que no había condiciones para dar el debate.
Tania Larios, del PRI, afirmó que Morena se quedaría sola en el pleno para aprobar el asunto, con lo que quedaría claro que ‘no hay congreso’.
Xochitl Bravo, de Morena, dijo que en el Congreso CDMX siempre se ha privilegiado el diálogo y sostuvo que los opositores son responsables de las agresiones físicas.
Morenistas y opositores anunciaron que denunciarán públicamente las ‘agresiones’ sufridas durante el debate. Posteriormente, las bancadas de PRI, PAN y MC abandonaron el recinto legislativo.
Los legisladores de Morena avalaron el dictamen con 45 votos a favor, cero contra y cero abstenciones, sin ningún tipo de debate.
Los morenistas aún presentaron un cambio en lo particular al dictamen, el cual avalaron por unanimidad y sin ningún tipo de exposición.
El morenista Víctor Hugo Romo afirmó que la iniciativa fue presentada por la jefa de Gobierno, Clara Brugada, para darle forma a un órgano desconcentrado encargado de transparencia, el cual formaría parte de la administración central.
Según Romo, los panistas intentaron chantajear a la mayoría para colocar a un ‘contralor’ en el instituto de transparencia. También dijo que el PAN planteó crear un órgano colegiado, con el objetivo de ‘negociar’ o ‘cabildear’ los nombramientos.
Aún así, Romo reconoció que la mayoría morenista aceptó crear un órgano colegiado, con un ‘consejo’. Sin embargo, inmediatamente después dijo que esto debería ‘corregirse’ en el pleno porque no es posible tener un organismo colegiado. No ahondó en los argumentos para sostener el cambio de postura.
Ya no había legisladores de oposición para replicar esta versión, que no mereció ningún comentario en sesión de los legisladores morenistas.