“Tenemos una expectativa de viejos pobres porque no hemos atinado a construir un sistema de protección universal”, señaló Pedro Vásquez.
El régimen actual de seguridad social en el país es impresentable, por lo que urge realizar una reforma integral que garantice pensiones para los mexicanos durante su vejez, afirmó Pedro Vásquez Colmenares, economista experto en temas de pensiones.
“No hay una visión sistémica de que esto, no es un tema técnico ni financiero sino social. Si 60 por ciento de los mexicanos no están protegidos por el régimen general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) tenemos un régimen de seguridad social impresentable como país“, declaró en entrevista para Aristegui en Vivo.
Comentó que el tema de pensiones en México se divide en tres grandes capítulos: el régimen general de pensiones del IMSS, el de los servidores públicos, y el de la inequidad, que padecen 60 por ciento de los mexicanos.
El experto agregó que el panorama es “delicado y preocupante”, ya que ambos sistemas presentan problemas debido a que en la mayoría de los casos no se ahorró el suficiente dinero o no se cotizaron las semanas completas.
“Tenemos una expectativa de viejos pobres porque no hemos atinado a construir un sistema de protección universal”, observó.
Al recordar que hace diez años la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) estimaba que para 2021, el 69 por ciento de los trabajadores no acumularía el dinero suficiente para pensionarse, el economista señaló que según cifras recientes de ese organismo indican que el próximo año al menos 75 por ciento no obtendrán su pensión como querían.
“Las reglas del sistema no previeron un fenómeno como el de la informalidad continua ni el de las bajas tasas de ahorro obligatoria”.
Por ejemplo, señaló, “la contribución a la pensión mensual debe ser de entre 12 y 16 o 18 por ciento, y ahorita estamos en 6.5 por ciento de la contribución total a la cuenta de ahorro para el retiro”.
En este contexto, Vásquez Colmenares consideró que lo único que se pude hacer es ver hacia adelante y corregir de manera gradual.
“No vamos a pasar de 6 a 12 en un sólo movimiento, tiene que ser algo gradual, tendrá que tomar varios años, pero ya no debemos posponer más, como sucedió en la administración anterior, que por 12 años se fue posponiendo la solución”, observó.
Desde su punto de vista, la situación del sistema de pensiones en México “es como una gangrena”, que al inicio se puede curar y atender, pero si se deja crecer, va a ser mucho más agresiva.
“Nunca ha habido mejor momento más que hoy. Hoy es el mejor momento para iniciar esa reforma integral a la seguridad social”, expresó.
El economista mencionó que hay países en Latinoamérica que tienen ingresos per cápita equivalentes o incluso inferiores a los de Mexico, pero hicieron la tarea de prever buenas pensiones y actualmente tienen buenos ahorros, por lo que confió en que el gobierno mexicano pueda lograr lo mismo.
Si bien consideró que las pensiones para adultos mayores sin seguridad social que ofrece el gobierno federal son un paliativo, recordó que durante 30 años se han desarrollado estos programas asistenciales sin lograr un verdadero esquema de protección universal.
En su opinión, “el reto es lograr que este país camine a lo mejor en diez años, pero firmemente a un esquema de protección social, porque las desigualdades en derechos sociales son tremendas… Una pensión universal es la mejor manera de democratizar el bienestar”.
Asimismo, indicó que se requiere integrar las partes que están inconexas, ya que por ejemplo el IMSS y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) tienen un diseño muy distinto. “Hay que balancear”.
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“En el caso de los servidores públicos, hay más de 130 esquemas de pensiones en los estados y a nivel federal, y no todos están fondeados, no tienen equilibrio. La mayor parte hoy presentan déficit de operación porque gastan más de lo que reciben, porque se aumentaron los beneficios durante décadas y nunca se fondearon”, añadió.
Vásquez Colmenares comentó que para este año el gasto en pensiones será de casi un billón de pesos, lo que lo significa que es el componente más grande del presupuesto federal.
“No es una bomba que va a explotar, en realidad tenemos un campo minado de bombas de pensiones desde hace 10,15 o 20 años y poco a poco han venido ampliándose las explosiones, los impactos, y es importante que esto no se posponga”, insistió.
A continuación la entrevista completa: