Una página web fue la solución que encontró la doctora Ana Cecilia Jara para denunciar y dar a conocer la discriminación que viven ella y sus colegas al ejercer su profesión.
“Estamos cansadas de que nuestros años de preparación y estudios pierdan validez cuando a pesar de presentarnos como doctoras, los pacientes preguntan si vendrá el doctor o buscan la confirmación del diagnóstico con el primer hombre que se les presente”, advierte en la página oficial del proyecto: soydoctoranosenorita.com.
Asimismo, resalta la importancia del lenguaje para reconocer el esfuerzo y la profesión de las médicas. Indica que desaparecer que las nombren como “señoritas” significa deshacer la identificación de las mujeres con adjetivos como “delicadas”, “inmaduras”, “dependientes” e “incapaces”.
Dentro de las denuncias en la página se encuentran:
A través del siguiente video muestra la fatiga que generan estas frases en el desarrollo de su carrera.
“La cultura hospitalaria tiene que cambiar, y esto se va a lograr cuando todas hagamos equipo, comenzando con algo que puede parecer simple, pero no lo es: el lenguaje”, se puede leer en la página del proyecto.
Cabe señalar que de las 305 mil 418 personas ocupadas como médicos, 54% son hombres, mientras que 46% son mujeres, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo.
Por otro lado, solo el 8.2% de las personas ocupadas y formadas en ingeniería civil son mujeres, lo que evidencia la importancia de eliminar los estereotipos para generar que más mujeres se involucren en esta área.
Un ejemplo claro de esto es que en 2015 la ingeniera Isis Anchalee fue la imagen del anuncio de contratación de su empresa. La publicidad se colocó en autobuses donde los usuarios viralizaron su foto porque consideraban que era “demasiado guapa para ser ingeniera de verdad”.
La respuesta de Anchalee fue crear una etiqueta #ILookLikeAnEngineer (#ParezcoIngeniera) donde cientos de ingenieras subieron fotos de sí mismas con esas palabras donde sujetaban carteles con la frase: “Este es el aspecto de una ingeniera”.
One last thing before I hit the road… Stoked my @SmirkWithUs #ILookLikeAnEngineer shirt came in! pic.twitter.com/OIYPnWsfaE
— Isis Anchalee (@isisAnchalee) September 16, 2015
Los estereotipos y sesgos fundados en ellos evitan que personas calificadas y capaces lleguen a determinados empleos. Esto afecta los derechos, la autonomía y el empoderamiento de los géneros no masculinos, indican Gala Díaz, Martín Rapetti y Magalí Brossio en su estudio “Razones económicas para reducir las brechas de género en el mercado”.