El cuerpo de la doctora María Elizabeth Montaño Fernández no presentaba signos de violencia y todas sus pertenencias se encontraron en su bolsa ubicada a un costado de ella.
Suicidio es la principal línea de investigación seguida por la Fiscalía General de Morelos en torno al caso de la doctora María Elizabeth Montaño Fernández, activista trans cuyo cuerpo fue encontrado sin vida a un costado de la autopista México-Cuernavaca.
Además de médico general, Montaño Fernández se desempeñaba como jefa del área de Calidad Educativa en el Centro Médico Nacional Siglo XXI.
Sobre la localización de su cadáver en el municipio de Huitzilac, la dependencia estatal informó que a las 15:12 horas del jueves 18 de junio se recibió un reporte que indicaba que en un predio colindante con el parque denominado “Los Columpios”, ubicado en el poblado de Tres Marías, se había localizado el cuerpo sin vida de una persona con características femeninas.
El reporte provocó que se activaran los protocolos de atención al feminicidio por cuestiones de género y que acudieran al lugar del hallazgo peritos de la Fiscalía Especializada y agentes de la Policía de Investigación Criminal.
El cuerpo de la doctora no presentaba signos de violencia y todas sus pertenencias se encontraron en su bolsa, a un costado de ella.
“En el paraje localizaron el cuerpo sin vida sin que presentara signos de violencia y a un lado del cuerpo, una mochila y un bolso de mano con pertenencias personales de la persona, identificaciones, dinero en efectivo, tarjeta bancaria, equipo celular, dos bolsas resellables conteniendo diversas pastillas sin etiquetar y dos botellas de agua entre otros artículos.
“El cuerpo fue identificado como María Elizabeth ’N’, de 47 años de edad, quien fue trasladada a las instalaciones del Servicio Médico Forense para la realización de los estudios y acciones periciales de acuerdo al protocolo de atención”, informó la Fiscalía de Morelos.
La dependencia confirmó que el cuerpo no presentaba lesiones en la superficie corporal ni huellas de violencia o interacción de terceras personas, por lo que se fortaleció la hipótesis del suicidio por ingesta de algún medicamento.
“Se iniciaron los estudios de patología y muestras de tejido que fueron enviados a laboratorios especializados, cuyos resultados definirán el compuesto ingerido y el daño correspondiente a los órganos que derivara en el deceso”, añadió.
La activista se encontraba desaparecida desde 10 días antes.
En la Fiscalía General de la Ciudad de México existía una denuncia por su desaparición.
Dentro de las investigaciones realizadas hasta ahora y de acuerdo con lo declarado por los propios familiares, María Elizabeth había manifestado su deseo de privarse de la vida.
Incluso escribió un correo cuyo envío programó para después de su desaparición.
En el correo redactó un mensaje póstumo a sus familiares.