Puede que estés hasta la filadelfia de la tarta de queso. O puede que te siga gustando a pesar de la burbuja de este postre en la que vivimos. En cualquiera de los dos casos, el vídeo de hoy te interesa, porque incluye una vuelta de tuerca capaz de satisfacer por igual a los aburridos y a los que aún son fanáticos. ¿Qué nuevo ingrediente obra semejante magia? El chocolate.
La autora de este giro es nuestra colaboradora Clara P. Villalón, que ya nos inició en los misterios de la tarta de queso desparramada allá por 2017. La versión chocolateada forma parte del catálogo de Mamá Naranja, su proyecto familiar de postres caseros a domicilio, y no hay más que verla para intuir que es droga dura. Si quieres aprender a hacerla, dale al play en la ventanita de arriba.
TARTA DE QUESO CON CHOCOLATE DE MAMÁ NARANJA
Ingredientes
Base de galleta
4 galletas Lotus o similares160 g de galletitas saladas85 g de mantequilla2 cucharaditas de cacao en polvo1 cucharada de azúcar
Tarta
300 g de queso crema260 g de chocolate para fundir con 70% de cacao1 cucharada de cacao en polvo40 ml de brandy (o ron, o whisky)60 g de mantequilla400 ml de nata líquida (18% MG)6 huevos185 g de azúcar1 pizca de sal
Preparación
Empezar con la base triturando las galletas. Juntarlas con el cacao y el azúcar. Derretir la mantequilla, añadirla y mezclar con una cuchara.En un molde untado con mantequilla y con papel de hornear en el fondo, formar una base de galleta compacta que suba un poco por los bordes, ayudándose con una cuchara (ver vídeo). Aplastar bien, meter en el congelador y dejar que se congele completamente (unas dos horas).Derretir el chocolate con la mantequilla y mezclar bien con el queso crema, la cucharadita de cacao, el brandy, la mantequilla, la nata, los huevos, el azúcar y la sal.Poner la crema resultante sobre la base congelada.Hornear con el horno precalentado a 190ºC durante 24 minutos. Debe bailar por el centro al moverla, y se han tenido que formar una especie de ondas en el borde.Dejar enfriar completamente antes de consumir, sin meter la tarta en la nevera. Separar el borde con un cuchillo, desmoldar y espolvorear, si se quiere, con más cacao en polvo.
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