Todos tenemos claro que hay que cambiar las sábanas con regularidad. Aunque nos duchemos a diario, por la noche se acumulan multitud de ácaros y bacterias, lo que puede hacer incluso que no descansemos de manera adecuada. Además, la mala limpieza de las sábanas puede dar lugar a multitud de problemas en la piel y alergias. Pero, ¿cuál es la frecuencia para cambiar las sábanas? Tenemos la respuesta definitiva.
La importancia de cambiar las sábanas
Recientemente, investigadores del Reino Unido han descubierto un dato demoledor: más del 50% de los hombres solteros pueden pasar más de un mes sin lavar las sábanas. Más allá de la higiene, no cambiar las sábanas con la frecuencia adecuada puede provocar multitud de problemas de salud.
Cuando dormimos, sudamos, aunque sea en invierno. Además, nuestra piel se renueva y perdemos células muertas. También salivamos. Todo esto se acumula en mayor o menor medida en las sábanas. A esto hay que sumar que los textiles son la superficie idónea para que se acumulen elementos como el polvo o el pelo de las mascotas.
Según explica una psicóloga experta en sueño en una entrevista a la ‘BBC’, esta mezcla se puede convertir en un «caldo de cultivo» para la proliferación de hongos, bacterias y ácaros.
Lograr un buen descanso es fundamental para tener una buena salud tanto física como mental. Cuando el cerebro está descansado, la memoria y la capacidad de atención y concentración funcionan a la perfección.
Teniendo todo esto en cuenta, queda claro que lavar las sábanas con regularidad es fundamental. Los expertos recomiendan cambiar las sábanas una vez por semana en invierno y dos veces por semana en verano.
Cumplir con esta recomendación nos va a ayudar a evitar problemas de salud y a conseguir un descanso más reparador.
Claves para elegir las mejores sábanas
Durante el proceso de decisión de compra, uno de los principales factores que debemos valorar es el tejido. Lo ideal es elegir tejidos naturales, como el lino o el algodón, porque garantizan una adecuada absorción de la humedad y transpirabilidad. Los tejidos naturales se pueden mezclar con poliéster, pero es importante que el poliéster no supere el 50% para que la tela sea suave.
Por supuesto, debemos fijarnos en las medidas de las sábanas según el tamaño de la cama: individual de 90 centímetros, individual de 105 centímetros, doble de 135 centímetros, de matrimonio de 150 centímetros, queen size de 160 centímetros o king size de 180 centímetros o más.
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