Terminada la Liga, llega el momento de pensar en el futuro sin solución de continuidad. Se abre la ventana para perfilar los planes que en la dirección deportiva de la Real estén ideando, con Martin
Odegaard como uno de los máximos exponentes del proyecto que viene. La conclusión del campeonato da paso a que en Anoeta se puedan centrar en atar al noruego. Su actual contrato de cesión terminaba en junio, fue prorrogado hasta el final atípico de esta Liga, y ahora que ha llegado, es el turno para culminar los trámites con el Real Madrid.
Tal y como viene informando MD, Odegaard tiene decidido continuar en la Real la temporada que viene y así cumplir con el pacto de palabra alcanzado entre las partes el pasado verano: que la cesión a la Real durara dos campañas. El acuerdo definitivo depende de que el Real Madrid, propietario de los derechos del jugador, acepte la continuidad del nórdico en Donostia. En la Real confían en que no haya sorpresas desagradables. A partir de ahora, con la temporada vista para sentencia, las negociaciones desembocarán en la decisión final. Mientras, Martin Odegaard era captado por las cámaras de la Real camino del Metropolitano, donde aspira a reaparecer tras ser dosificado por Imanol en la penúltima jornada ante el Sevilla debido a las molestias que arrastra en la rótula.