Con un rostro tranquilo y sin arrepentimiento, Patrick Crusius, presunto responsable del tiroteo ocurrido en El Paso el pasado 3 de agosto, se presentó el jueves en su primera audiencia en la corte del Condado de El Paso.
Durante la corta audiencia de solo dos minutos, Crusius se declaró inocente ante las acusaciones que lo convertirían culpable del ataque que dejó a 22 personas sin vida al interior de una tienda Walmart en El Paso.
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Crusius, de 21 años, escuchó y leyó los cargos que se le imponen mientras que a un costado de él se encontraban sus abogados, quienes aseguraron que harían todo lo posible por evitar su pena de muerte.
“Nosotros vamos a hacer todo lo posible por salvarle la vida a Patrick y vamos a usar todo el esfuerzo para salvarle la vida en vez de tratar de quitarle la vida”, dijo Joe Spencer, abogado de Crusius.
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En la corte se encontraban familiares de las víctimas asesinadas, así como personas que sobrevivientes del tiroteo y activistas.
“Él es un cobarde, porque así como agarró esa pistolota debería asumir la responsabilidad de lo que hizo”, dijo la activista María Elena Gordon.
Por ahora, la comunidad de El Paso espera que Crusius no solamente pague con cárcel en caso de que sea encontrado culpable, sino que sea condenado a muerte.
“La pena de muerte y soy católica y cristiana, pero esto no puede seguir”, dijo Gordon. “Todos los blancos que han matado a toda la gente en los Estados Unidos, en Douglas, en Colorado, están vivos, pero un mexicano que haga algo así, se lo comen vivo”.
Será el próximo 7 de noviembre cuando Crusius se presente en una segunda audiencia ante un juez.
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