Tu familia o tu grupo de amigos te han propuesto hacer un viaje de esquí este invierno, pero no sabes esquiar. ¿Debes renunciar al plan y quedarte en casa? Por supuesto que no, porque hay muchísimas cosas que puedes hacer más allá de esquiar.
Paseo por la nieve
La gran mayoría de nosotros llevamos un ritmo de vida caótico, así que por el bien de nuestra salud mental, de vez en cuando necesitamos parar y desconectar. Seguro que agradeces muchísimo dar un paseo por la nieve, disfrutando del silencio y de la naturaleza en todo su esplendor.
Eso sí, recuerda que es muy importante consultar la situación meteorológica para evitar imprevistos. Y, por supuesto, no te olvides de protegerte muy bien del frío, con la ropa adecuada y unas buenas botas de invierno.
SPA
Por lo general, la gran mayoría de alojamientos ubicados en estaciones de esquí tienen una zona de spa en la que uedes relajarte.
El baño turco tiene muchísimos beneficios para la salud física y mental. Favorece la renovación celular y la eliminación de toxinas, al tiempo que favorece el sistema nervioso. A esto hay que sumar que tiene grandes efectos relajantes.
Un baño en el jacuzzi también es una excelente opción: alivia el dolor, reduce el estrés y la ansiedad, mejora la circulación sanguínea, proporciona una gran sensación de bienestar…
¿Y qué decir de la sauna? Es estupenda para reducir el dolor muscular, mejorar la salud cardiovascular, aliviar los niveles de estrés y favorecer el movimiento de las articulaciones.
Paseo en motonieve
Muchas estaciones de esquí, como Sierra Nevada o Formigal, ofrecen el servicio de alquiler de una motonieve durante varias horas. Una actividad de lo más divertida con la que podrás acceder a luhares privilegiados, que se lleva a cabo con un guía titulado.
Leer en la chimenea
Si te gusta leer, ¿se te ocurre un mejor plan durante el viaje de esquí que devorar un buen libro frente a una chimenea encendida? La montaña es uno de los mejores destinos vacacionales para descansar. ¡Volverás a casa con las pilas recargadas!
Aprender snow
No importa la edad que tengas: nunca es tarde para aprender. Si no te llama demasiado la atención el esquí, puedes aprovechar para aprender snow. En todas las estaciones hay clases de iniciación, así que contrata a un buen profesional, ¡y disfruta de la actividad!
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