La boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva tiene todos los ingredientes para convertirse en la boda del año, aunque quizá ya lo sea sin haberse celebrado. El camino de los novios al altar ha sido poco menos que una carrera de fondo. Un sinfín de obstáculos han puesto en jaque su sí quiero, pero la cuenta atrás ha llegado a su final. Este sábado 8 de julio convergen sus caminos ante Dios, haciendo buena su profunda devoción cristiana, esa que seguramente les haya permitido reconciliarse.
Los invitados tienen una cita con los grandes protagonistas del enlace antes de la ceremonia. Se trata de la preboda que se ha celebrado este viernes por la noche. El lugar elegido era el emblemático y suntuoso Hotel Ritz de Madrid. Allí han degustado un espectacular cóctel creado por el prestigioso chef Quique Dacosta. Un calentamiento de motores en compañía de seres queridos y amigos. Pero eso ya es historia.
Alejandra Onieva, en la preboda de Tamara Falcó y su hermano Íñigo/ Gtres
Los datos esenciales de la boda de Tamara Falcó
El momento más esperado tendrá lugar este sábado a las 19:00 horas. Ese será el momento en el que dará comienzo la boda entre Tamara Falcó e Íñigo Onieva, en la exclusiva finca El Rincón, el espectacular palacio que la marquesa heredó de su padre, Carlos Falcó. Ubicado en la Aldea del Fresno de Madrid, se trata de una joya construida en el siglo XIX. Allí estarán presentes los 400 invitados que confirman la lista de bodas.
Jardín del Palacio de El Rincón. / Gtres
¿Quiénes son los invitados? La nómina es casi interminable, pero entre familia, amigos, compañeros y demás seres queridos y compromisos, presenta nombres como los de las madrinas (Isabel Preysler y Carolina Molas); los hermanos de Tamara (Chábeli, Julio José Iglesias, Ana Boyer, Xandra, Duarte, Aldara y Manuel Falcó, con la duda de Enrique Iglesias); los compañeros de programa de Tamara Falcó (Pablo Motos, Nuria Roca, Juan del Val y Cristina Pardo); los jueces de MasterChef (Samantha, Jordi Cruz y Pepe Rodríguez); Vicky Martín Berrocal, Eugenia Martínez de Irujo, Eugenia Silva, su amigo Juan Avellaneda o Carolina Herrera, diseñadora de su vestido de novia. También están invitadas el grueso de amigas de Tamara (Casilda y Ani Finat, Clara López de Lemus, Andrea Gómez-Acebo, Huga Rey o Luisa Bergel), que fueron señaladas por una de las últimas polémicas que rodearon a la boda. Tampoco faltarán autoridades políticas como la presidenta de la Comunidad de Madrid (Isabel Díaz Ayuso) o el alcalde (José Luis Martínez Almeida). Del mismo modo, se ha hablado de que el tenista Rafa Nadal también ha aceptado la invitación de los novios.
Tamara llegará a El Rincón dos horas antes para ultimar todos los detalles de su estilismo y maquillaje. Se ha sabido que ha contratado un ejército de maquilladores para que cuiden de su imagen al milímetro hasta última hora. Su vestido es toda una incógnita, si bien se sabe que lo ha creado a conciencia el director creativo de Carolina Wes Gordon, quien llegó a Madrid a primera hora de este viernes. La marquesa se cambiará de vestido después de la cena de cara al baile nupcial.
En cuanto a sus joyas, la colaboradora televisiva lucirá la tiara familiar, con la que se casó Amparo Corsini con su hermano Manuel Falcó, en 1999. Además de su anillo de compromiso y unos pendientes de Tous Atelier.
Tamara Falcó en ‘El Hormiguero’ / Gtres
El lujo y la exclusividad marca cada detalle de la boda. Las iniciales de Tamy e Íñigo estarán diferentes artículos de esta. El cóctel se dispondrá sobre los jardines de El Rincón, mientras que la cena se llevará a cabo bajo unas carpas instaladas para la ocasión. El menú corre a cargo del chef cinco estrellas Michelin Eneko Atxa, que tendrá a su lado a 45 cocineros de su equipo del restaurante Azurmendi. El vino será, cómo no, de las bodegas Falcó.
Se prevé que la fiesta del sábado se alargue hasta las 06:00 AM, gracias a la música en directo de un dj sorpresa y los cócteles, con Moët & Chandon como marca contratada. Después de pasar el epicentro de la boda el sábado, Tamara Falcó e Íñigo Onieva han organizado el domingo por la tarde una cena de despedida. Será el broche de oro a casi 72 horas de celebración por todo lo alto. Lo que vendrá después será una luna de miel con Australia como destino. ¡Qué vivan los novios!
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