Enfrentarse a la decisión de cambiar de género es uno de los mayores desafíos (y denominador común) a los que se han enfrentado más de uno, dos y hasta tres hijos de personalidades conocidas de nuestro país y lejos de nuestras fronteras. Es el caso de Ruby, la hija adoptada de Jamie Lee Curtis y Guest-Curtis que, recientemente, se ha convertido en noticia por las palabras que la interprete de Todo a la vez en todas partes le dedicó a través de su perfil de Instagram con motivo del Día Internacional de la Visibilidad Trans, que conmemora y reivindica a partes iguales anualmente cada 31 de marzo, los derechos de las personas transgénero y la sensibilización en contra de la transfobia en todo el mundo.
«El amor es amor. El amor de una madre no conoce juicio. Como madre, me solidarizo totalmente con mis hijos a medida que avanzan en el universo como auténticas personas, con sus propias mentes, cuerpos e ideas. En este día de visibilidad trans mi hija y yo somos visibles», escribió. Ruby Guest nació un 15 de marzo de 1996 y originalmente se identificaba como Tom, cuando fue adoptada junto con su hermana Annie, por la actriz y su esposo Christopher Guest. Sin embargo, en 2020 decidió contarle a sus padres y al mundo que no se sentía identificada con su desarrollo en el género de nacimiento. Así, su transición comenzó a los 25 años.
Jamie Lee Curtis y su hija Ruby / Gtres
Antes, en abril de 2019, tomó la misma decisión Jackson, el primer hijo adoptivo de Charlize Theron (47). La actriz y modelo sudafricana nacionalizada estadounidense, contó a los medios que su hijo le había confesado que se sentía niña y quería comportarse como tal. De ahí, las fotografías del pequeño disfrazado del personaje Elsa, de la película de Disney, Frozen un año antes. «Sí, yo también pensaba que era un niño, hasta que con 3 años me miró y me dijo: ¡No soy un niño!», explicó la actriz a Daily Mail sobre su hija.
Otro caso es el de Stephen (antes Kathryn), el primogénito de Warren Beatty y Annette Bening que, recién cumplidos los 14 años, comunicó a su entorno que se sentía niño. Stephen fue de las primeras personas en redes sociales en usar abiertamente el término cisgénero para describir a las personas conformes con el sexo que nacieron, en oposición a los transgénero.
Igualmente conocido es el lance del hijo de Brad Pitt y Angelina Jolie o el del único hijo de Cher y Sonny Bono, Chaz, que, a sus cuarenta años, decidió cambiar de sexo después de creer, en sus propias palabras, haber confundido su «orientación sexual con su identidad de género». Chaz nació como Chastity Sun Bono en 1969. Sin embargo, «de pequeña, podía ser un niño más, jugar deportes y encajar en el mundo masculino. Cuando llegué a la pubertad, sentí que mi cuerpo me estaba traicionando», expresó en una entrevista. «En todas partes me sentía abofeteada por la feminidad. Fue realmente traumático. A los 13 años, ya me sentía atraída por las mujeres y creí que era lesbiana. Hoy entiendo que fue un error. Confundí identidad de género con orientación sexual», añadió.
En España el caso más sonado de los últimos tiempos es el de la hija de Nacho Vidal y Franceska Jaimes. El actor porno compartió con su más de un millón de seguidores en Instagram ya en el año 2006, que tenía hija transexual de, por entonces, nueve años. «Mi hijo Nacho ahora se llama Violeta. Al principio pensaba que mi hijo era marica y le dije que no pasaba nada», relató. No obstante, poco después entendió que lo que le pasaba al es que había nacido niño, pero era una mujer. «Violeta es muy madura, tiene muchas responsabilidades y una lucha que no deberían existir para alguien de 9 años. La primera barrera que vivimos fue el nombre, porque en los documentos ella aparece como Ignacio Puerta González, pero ella es una niña por dentro y por fuera. Eso como padre duele». Sobre Violeta y con la pequeña como protagonista, de hecho, Nacho produjo en 2019 el documental Soy una niña, me llamo Violeta.