WASHINGTON – El presidente estadounidense firmó este miércoles en la Casa Blanca el nuevo tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá, conocido como T-MEC (USMCA, en inglés).
La ceremonia fue aire libre, en el jardín de la residencia presidencial, e incluyó a unos 400 invitados, entre ellos empresarios, trabajadores agrícolas, y autoridades de México y Canadá.
El gobierno mexicano a su vez ya ratificó en el 2019 el acuerdo comercial, pero el gobierno canadiense apenas se encuentra en la fase de discusiones y podría tardar meses en aprobarlo.
Sin Canadá a bordo el pacto no puede entrar en vigor.
Canadá y México son los dos principales mercados de exportación de los bienes estadounidenses. Se espera que el nuevo pacto, junto con la firma de un acuerdo de “Fase Uno” con China, reduzca las tensiones comerciales que contribuyeron a frenar el crecimiento económico a nivel mundial.
Trump ha presentado el acuerdo como “un nuevo modelo de comercio para el siglo XXI”. En declaraciones a sus partidarios en un mitin en Nueva Jersey el martes por la noche, Trump dijo: “Mañana reemplazaremos la pesadilla del TLCAN, uno de los peores acuerdos comerciales de la historia”.
Canadá decidió aplazar su votación sobre el T-MEC a que el acuerdo se aprobara en EEUU, pero se espera que la Cámara de los Comunes del Parlamento vote sobre el pacto cuando retome sus tareas a finales de enero.
El Senado estadounidense aprobó el pacto comercial una hora antes de que la Cámara Alta recibiera formalmente los cargos para el juicio político a Trump.
El T-MEC es fruto de un proceso de renegociación impulsado por Trump para actualizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), en vigor desde 1994.
Los tres países firmantes del TLCAN rubricaron el T-MEC en noviembre de 2018, pero el proceso de ratificación se alargó más de un año en EEUU debido a las dudas de los demócratas y las asociaciones sindicales sobre las garantías de aplicación de los estándares medioambientales y laborales.
En diciembre pasado, Trump acordó con la oposición una nueva versión del T-MEC que la líder demócrata en la Cámara Baja, Nancy Pelosi, definió como “una victoria para los trabajadores estadounidenses”.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, firmó en la capital mexicana esa nueva versión con el representante de Comercio Exterior de EEUU, Robert Lighthizer, y la viceprimera ministra de Canadá, Chrystia Freeland.