El expresidente Donald Trump es demasiado cobarde para obedecer un citatorio del Congreso de los Estados Unidos que lo obliga a testificar ante un comité especial que investiga su papel en el ataque al Capitolio del 6 de enero de 2021, afirmó la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
“No creo que sea lo suficientemente hombre para presentarse. No creo que sus abogados quieran que se presente porque tiene que testificar bajo juramento”, dijo Pelosi en una entrevista transmitida este domingo.
Veremos si es lo suficientemente hombre para presentarse.
El viernes, el comité especial anunció que había emitido el citatorio a Trump, dándole hasta el 4 de noviembre para presentar una amplia gama de documentos relacionados con sus actividades antes y después del ataque mortal del 6 de enero por parte de los partidarios del expresidente. El panel también informó a Trump que quiere que comparezca para declarar alrededor del 14 de noviembre.
Desde que perdió las elecciones de 2020, Trump ha insistido en que es víctima de un fraude electoral generalizado, una acusación que ha sido desestimada por decenas de casos judiciales y auditorías.
Sin embargo, Trump ha sostenido que no hizo nada ilegal al presionar ese caso, incluso el día de los disturbios en el Capitolio. Se refiere regularmente al panel del Congreso como el “comité de deselección” y lo ha acusado de lanzar ataques políticos injustos contra él.
La violencia en el Capitolio estalló cuando los partidarios de Trump intentaron impedir que el Congreso certificara formalmente la decisiva victoria del demócrata Joe Biden en las elecciones presidenciales de 2020.
Trump y Pelosi han tenido una relación larga y tormentosa.
Ella dirigió dos procedimientos de juicio político en su contra y su disgusto mutuo a veces se mostró públicamente durante su presidencia.
Al concluir el discurso de Donald Trump sobre el “Estado de la Unión” de 2020 ante el Congreso, Pelosi partió con desdén por la mitad una copia impresa de ese discurso mientras estaba sentada detrás de él durante el evento televisado a nivel nacional. Eso ocurrió después de que Trump llegó al podio de la Cámara para comenzar el discurso y se negó a estrechar la mano de Pelosi.
El año anterior, una reunión en la Casa Blanca entre Trump y los líderes del Congreso sobre la política de Estados Unidos en Siria estalló en cólera cuando, según los informes, Trump llamó a Pelosi una “política de tercera categoría” y luego dijo que estaba “desquiciada”.
Afuera de la Casa Blanca después de la reunión de la que los demócratas salieron furiosos, Pelosi dijo a los periodistas que Trump había sufrido un “colapso”.
También el domingo, la representante republicana Liz Cheney dijo al programa “Meet the Press” de NBC que Trump probablemente haya cometido varios delitos por los que el Departamento de Justicia de Estados Unidos podría potencialmente procesarlo.
“Hemos sido muy claros acerca de una serie de delitos penales diferentes que probablemente estén en juego aquí”, dijo Cheney, uno de los dos miembros republicanos en el panel selecto de la Cámara. (Rts)
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