Suleimán Raisuni, columnista estrella de Marruecos, muy crítico con el poder, fue condenado el viernes por la noche por el Tribunal de Apelación de Casablanca a cinco años de cárcel por supuesta agresión sexual contra un hombre. Raisuni, de 49 años, se encontraba ya en prisión preventiva desde el pasado mayo y mantiene una huelga de hambre desde hace tres meses y tres días, por considerarse víctima de un “juicio político”.
El periodista fue detenido después de que un activista LGTBI publicase en mayo de 2020 en Facebook que Raisuni se había abalanzado sobre él a finales de 2018 para satisfacer sus deseos sexuales aprovechándose de la “debilidad y salud moral” que padecía en esos momentos. En Marruecos este tipo de denuncias no son nada frecuentes, ya que el artículo 489 del Código Penal castiga las relaciones entre personas del mismo sexo con penas de hasta tres años de prisión. Sin embargo, el post en Facebook se transformó a los pocos días en una denuncia formal y el columnista ingresó en prisión de forma preventiva.
Más información
Raisuni solía decir a sus próximos que criticar al Gobierno en Marruecos es una pérdida de tiempo. Y prefería apuntar hacia el Estado, hacia lo que él consideraba “el verdadero poder”. El columnista es tío de la periodista Hajar Raisuni, de 28 años, quien fue condenada en 2019 a un año de prisión por someterse a un supuesto aborto ilegal que ella negó. “A mi sobrina la han detenido para enviarme a mí un mensaje. En realidad vienen a por mí”, declaró entonces el periodista a este diario. Finalmente, la sobrina fue indultada por el rey a los dos meses de ser encarcelada.
Hajar Raisuni, indicó a este diario desde Sudán, donde reside con su pareja, que la condena contra Suleimán es “inválida, ilegal e injusta”. La sobrina añade que el juez no ha “escuchado” al acusado y ha rechazado su presencia en todas las audiencias. Y explica que la sentencia no se basa en ningún certificado médico ni en la declaración de un solo testigo. “Desgraciadamente”, señala Hajar Raisuni, “esta decisión injusta se ha tomado en nombre del rey”. Hajar Raisuni hizo referencia a la “nueva era” que promueve Mohamed VI en el país desde hace dos años, con la creación de un comité encargado de poner en marcha un “Nuevo Modelo de Desarrollo”. “En realidad”, objeta Hajar Raisuni, “solo se trata de una nueva era de los años del plomo”, en referencia a la represión más dura de Hassan II. “Marruecos pierde mucho con esta condena”, concluye.
Suleimán Raisuni había solicitado el 6 de julio una ambulancia y una silla de ruedas para asistir a la audiencia, a causa de su estado de salud provocado por la huelga de hambre. El juez se lo denegó y Raisuni rechazó asistir al juicio. Su esposa, Jolud Mojtari, declaró el 2 de julio a este diario que su marido, con el que tuvo un hijo que cumplirá dos años en septiembre, corre peligro de muerte a causa de la huelga. Precisó que, ha sufrido una “transformación total”. “Le ha cambiado la voz y la cara. Su cuerpo es casi el de un cadáver”. Este sábado, Mojtari añadió: “Yo temo por Suleimán”, añadió. “Porque creo que no va a detener su huelga [de hambre] después de esta sentencia. Para mí, en todo caso, esto es una victoria. Si han dictado una sentencia contra él tan dura, eso significa que le temen”.
La esposa indicó ayer a este diario que, aunque tenía pocas esperanzas, la sentencia le ha parecido “muy dura”. Añadió que el tribunal no aceptó la mayor parte de las demandas solicitada por la defensa. Y dijo que la condena solo se puede interpretar como “una venganza” hacia “un periodista valiente”. “Es una venganza también contra su familia, porque yo estoy sola con un bebé que va a cumplir dos años y sin recursos apenas para mantenernos”.
El secretario general de Reporteros Sin Fronteras, Christophe Deloire, solicitó este sábado a través de un comunicado la puesta inmediata en libertad de Raisuni, mientras la defensa del periodista podría recurrir la sentencia. Deloire señala que la sentencia viene precedida de un proceso que ha durado cuatro meses y estaba “plagado de irregularidades”. La organización de periodistas informa de que Marruecos está relegado al puesto número 136º en su lista de 180 países sobre la libertad de prensa.
Juicio por espionaje
En Marruecos se celebra también estos días otro juicio contra el periodista de investigación Omar Radi, de 34 años, acusado de espionaje, de atentar contra la seguridad interior del Estado y de violación. Durante una audiencia celebrada el pasado 29 de junio, Radi declaró al juez: “Los hechos que me reprochan están vacíos y no justifican mi encarcelamiento desde hace un año”. Tanto Raisuni como Radi han declarado ser víctimas de un juicio “político”.
Raisuni trabajaba como columnista y redactor jefe del diario Ajbar al Yaum, la única publicación en árabe crítica con las políticas impulsadas por el palacio real. El director y propietario de este periódico, Taufic Buachrín, fue condenado en noviembre de 2018 a 12 años de prisión por varios delitos de índole sexual, como violación e intento de violación. La empresa editora del diario echó el cierre el pasado marzo, tras esgrimir en un comunicado que sufría un “calvario” desde hacía tres años, con el director en la cárcel. También había sido excluido de las subvenciones públicas y no tenía publicidad.
Source link