Al menos un hombre ha muerto y nueve personas han resultado heridas tras el terremoto de magnitud 5,8 que ha sacudido este lunes por la mañana la isla griega de Creta. Según ha informado Protección Civil, el fallecido, que hacía trabajos de restauración en la pequeña parroquia del pueblo de Arkalojori, quedó atrapado al desplomarse la cúpula del templo tras el seísmo. El servicio de Bomberos ha notificado, además, nueve heridos. El sismo ha dejado también edificios derruidos y postes de electricidad caídos, y ha provocado el bloqueo de carreteras.
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El terremoto, registrado a las 09.17 hora local, tuvo una duración de 15 segundos y una profundidad de 10,4 kilómetros, según los datos del Instituto Geodinámico del Observatorio de Atenas. El epicentro se situó en la misma isla de Creta, a 24 kilómetros de la localidad de Árvi y 346 kilómetros al sureste de Atenas. El Centro Sismológico Europeo del Mediterráneo (EMSC) registró, en un principio, una magnitud de 6,5, mientras que el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) lo situó en 6,0.
El temblor, y las réplicas que le sucedieron ―la mayor de ellas de magnitud 4,5 en la escala de Richter―, han provocado el pánico en Heraklion, la principal ciudad de Creta, donde se vio correr a numerosos habitantes por las calles. Los centros educativos y edificios públicos de la región han sido cerrados.
El ministro griego de Emergencia Climática y Protección Civil, Jristos Stylianidis, quien se ha desplazado esta mañana a Creta para supervisar la situación, ha puesto en marcha el plan de respuesta inmediata de emergencias por terremotos. Además, un avión C130 Hércules, con una Unidad Especial de Desastres (EMAK), ha sido enviado a la isla para ejercer las labores de rescate.
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