Una española que ejerce de periodista para una televisión y relata su vida en redes sociales se ha convertido en viral al mostrar qué paga de luz y gas en Tokio. Los precios de este servicio básico están desatados en España. Aquí todas las casas han visto como se doblaba o hasta triplicaba la factura. Los comercios o empresas también han tenido que hacer malabares para pagar una factura que si vivieran en Tokio sería mucho más barata. Alucinante es el precio de la luz y el gas en este país.
Una española residente en Tokio, paga luz y gas y flipa
La periodista Maite GA nos cuenta su vida en Japón, además de cumplir con sus obligaciones de enviada especial en este país. Esta mujer que se ha adaptado a la perfección a la vida en este país nos enseña algo tan cuotidiano como ir a pagar la luz y el gas en el supermercado, algo muy habitual.
Con la factura en la mano, media España está flipando al ver lo que paga esta mujer en un mes de luz y gas. Teniendo en cuenta que las temperaturas han sido más bajas allí, con gas y electricidad para una familia en un piso que podría ser del tamaño de cualquiera de los de España, las comparaciones hacen daño.
En un mes, teniendo en cuenta que Maite teletrabaja o comparte contenido en sus redes sociales y está en casa, el precio de la luz y el gas es alucinante. Ella misma relata su experiencia: “Veréis que voy a una tienda de conveniencia KONBINI, a pagarlas en efectivo (decidimos no domiciliarlas). En esta ocasión, son las facturas del gas y de la electricidad – falta para el agua.”
Maite deja caer una pregunta: “Por curiosidad, ¿es mucho o es poco comparado con lo que pagáis en vuestras ciudades?”. En un mes ha pagado 48 euros de electricidad y 44 de gas. Los comentarios de españoles no se han hecho esperar al comprobar lo barato que son los servicios básicos en este país con unos sueldos mucho más elevados.
Algunos de los seguidores de Maite opinan que: “En comparación con España, lo que pagó en Japón es una risa…” o dan algunos datos: “517 euros, dos meses de luz y gas en Asturias, España”. Unos precios muy por encima que en Japón en ambos servicios que deberían ser esenciales y accesibles para todo el mundo.