Si se consultara a un joven habituado a los sinsabores de la búsqueda de empleo, esta imagen le parecería de ciencia ficción: más de 50 empresas poniendo ojos tiernos a los potenciales trabajadores para recibir un poco de atención. Sin embargo, eso es lo que ocurrió el martes en la primera Feria del Talento de Donostia (Guipúzcoa), en el marco de la octava Semana de la Innovación, que organiza Fomento de San Sebastián y se clausura hoy. Las empresas tecnológicas guipuzcoanas colocaron un estand en una de las estancias del Kursaal, el palacio de congresos emblemático de la capital. En una sola mañana se realizaron 600 entrevistas.
Desde que se abrieron las puertas a las nueve de la mañana, decenas de jóvenes trajeados llegaron currículum en mano para asistir a las entrevistas que tenían concertadas con empresas del sector tecnológico de la ciudad o para echar un ojo y decidir sobre la marcha con qué entidades querían probar suerte. A Fernando, de 30 años y graduado en ADE, le quedaban 10 entrevistas por delante cuando EL PAÍS habló con él, aunque no dudó en reconocer que realmente le interesaban cuatro. En su caso, desde que terminó la carrera, no le ha faltado trabajo, pero por “un pequeño desencuentro” en la empresa en la que trabajaba ha vuelto a buscar un empleo. Esta feria le ha dado la oportunidad de encontrar una alternativa.
Ilona también ha cursado ADE y el martes tenía cinco entrevistas concertadas. Esa mañana acababa de terminar una que había durado dos minutos: “Ha sido muy exprés”, comentó entre risas al terminar, aunque pensó en voz alta: “A ver si hay suerte”. En el caso de Sergio Sánchez, de 28 años, acaba de comenzar a buscar trabajo, después de haberse graduado en física. “Estoy empezando a hacer entrevistas y quiero ver cómo funciona el cara a cara con los entrevistadores. Si, ya de paso, encuentro trabajo, mejor que mejor”, comentó a su llegada a la Feria.
Entre las empresas que han participado en esta primera edición se encuentran Quirón Salud, Decathlon, Irizar o Tecnalia. Precisamente desde esta última, que es un centro de investigación científica enfocado en “hacer las nuevas tecnologías algo productivo para las empresas”, la captadora de talento Vanesa Benito aseguró que buscan todo tipo de perfiles técnicos. Sin embargo, ninguna de las entrevistas que celebraron ese día esta y el resto de empresas implicaba que comenzara la evaluación de esos jóvenes para optar al puesto; se trataba simplemente de una primera toma de contacto para empezar a tenerlos en cuenta en los procesos de selección de cada compañía.
Biotech Foods, una empresa que elabora carne cultivada, insistió en la Feria en que su objetivo es “tener una cartera de gente interesada para tenerlos en cuenta” cuando abran plazas nuevas. “Esta feria es genial porque a veces no es fácil llegar a ciertos perfiles”, aseguró Mercedes Vila, directora técnica de la compañía. Aun así, esos perfiles que demandan las compañías tecnológicas de la ciudad son muy variados: desde administrativos hasta doctores en una ingeniería, y desde graduados universitarios hasta titulados en Formación Profesional.
Aunque la percepción de que la jornada estaba siendo un éxito era casi general, algunas empresas no pudieron evitar sentirse desconcertadas. Amaia Barreiro, responsable de talento en Ikor, que desarrolla y fabrica sistemas electrónicos, se lamentó de no tener ninguna entrevista concertada y de haber recibido solo un par de currículums: “Esto está muy parado”, comentó junto a su compañera. En cambio, además del continuo goteo de jóvenes que acudían al Kuursal, largas colas de estudiantes de FP paseaban entre las empresas y recibían información.
El Ayuntamiento de San Sebastián también tuvo su propio estand, desde el que trató de orientar a los jóvenes que manifestaban su confusión o dudaban sobre los puestos a los que acercarse. Para la ciudad, la Feria supone un paso más hacia la retención del talento local. Marisol Garmendia, concejala socialista de Desarrollo Económico, explicó a El PAÍS que su objetivo es “aprovechar la necesidad de empleo cualificado que tienen esas empresas con nuestros jóvenes donostiarras, que tienen un alto grado de cualificación, tanto universitaria como de FP y conectar las necesidades de ambos”. Aunque eso no es suficiente. Íñigo Olaizola, responsable de la Semana de la Innovación, insistió en que también deben lograr que el ecosistema tecnológico y de innovación de la ciudad resulte atractivo en el exterior, para captar talento extranjero y de otras regiones.
Además de las ofertas de empleo, el Ayuntamiento ofrece 20 becas para trabajar en centros tecnológicos de primer orden a nivel mundial, como el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), en EE UU. “Nosotros elegimos los destinos después de haber hablado con entidades de aquí. Vamos a la escuela de ingenieros, por ejemplo, y decimos: vamos a mandar a gente al MIT para estos temas, ¿están interesados? Es decir, que los mandamos sabiendo que luego hay muchas probabilidades de que aquí le cojan después”, explicó Olaizola.
La estrategia de Fomento va más allá de intentar que los jóvenes donostiarras cualificados abandonen la ciudad: pretende que el empleo tecnológico cobre fuerza y se conozca a San Sebastián también por su ecosistema de innovación, más allá de los pintxos, la playa de la Concha o el Festival de Cine.
El éxito de la Feria splo podrá determinarlo el tiempo. Dentro de tres y seis meses Fomento de San Sebastián evaluará cuántos de los jóvenes que participaron en estas entrevistas fueron contratados, aunque puede que algunos reciban una oportunidad más adelante o decidan optar por otra oferta de empleo. En esta ciudad la tasa de desempleo juvenil (por debajo de los 30 años) se sitúa en un 14,8%; la media nacional de los menores de 25 prácticamente alcanza el 40%.
Puedes seguir a EL PAÍS TECNOLOGÍA en Facebook y Twitter o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.
Inicia sesión para seguir leyendo
Sólo con tener una cuenta ya puedes leer este artículo, es gratis
Gracias por leer EL PAÍS