Arturo Huerta comentó que “la política económica, más que defender a toda costa la austeridad fiscal, debe generar las condiciones de ganancia de mercado para que el sector privado invierta y así incrementar la actividad económica”.
Si el gobierno de México pretende que el país logre un crecimiento de 4 por ciento, debe cambiar su política fiscal, es decir gastar más allá de lo que recauda, indicó Arturo Huerta, profesor investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El sábado, el periódico Reforma mencionó que, de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda, los ingresos públicos totales sumaron 447 mil 959 millones de pesos, 7.5 por ciento menos que en igual mes del año pasado, y 24 mil 400 millones de pesos por debajo de lo previsto.
En entrevista para #AristeguiEnvivo, el economista explicó que durante enero cayeron significativamente los ingresos petroleros debido a una baja en las exportaciones y la disminución del precio de la mezcla.
Por otra parte, apuntó, en enero pasado hubo una disminución de la recaudación del Impuesto al Valor Agregado (IVA), en 12.3 por ciento, en relación al mismo periodo del año pasado.
“El IVA está íntimamente relacionado al consumo, entonces, esto está reflejando que está cayendo la demanda“, abundó.
Además, el profesor de la UNAM recordó que en diciembre, el gobierno disminuyó drásticamente el gasto, despidió gente, hizo reajustes, por la austeridad republicana, lo cual “se tradujo en disminución de consumo y del IVA en enero“.
En tanto, el Impuesto Sobre la Renta (ISR), que es el que pagan empresas y los empleados formales, sólo aumentó 1.4 por ciento en enero de este año, en relación al mismo periodo del año pasado, comentó.
“El ISR está íntimamente ligado a toda la actividad económica”, por lo tanto, la baja recaudación por este impuesto refleja una desaceleración, precisó.
“El gobierno recauda lo que gasta. Si el gobierno gasta poco, recauda poco, porque al gastar poco frena el ingreso de las empresas e individuos, por lo tanto, termina recaudando menos, de ahí que yo estoy en contra de la austeridad fiscal que la gente de Hacienda repite a cada rato”, sostuvo.
Huerta González expuso que la economía se compone de tres sectores: el público, el privado y el externo.
“Las finanzas del sector privado dependen del comportamiento de las finanzas públicas y del del sector externo, el sector externo nos es adverso, el país compra más allá de lo que vende, esas importaciones desplazan la producción nacional y afectan las finanzas del sector privado.
“Y si a eso le sumas que el gobierno está sacando a la economía más allá de lo que gasta, o sea, ese superávit primario que eso implica, que el gobierno recauda más de lo que gasta, excluyendo el pago de la deuda, entonces se está frenando el mercado interno y afectando las finanzas del sector privado“, anotó.
En opinión del economista, el discurso de la austeridad fiscal sólo favorece al sector financiero, porque le asegura el pago de la deuda, pero afecta al sector productivo nacional y “de ahí que la economía se está desacelerando”.
En este contexto, advirtió que si el gobierno sigue con esta disminución del gasto, la actividad económica se va a seguir desacelerando, porque el sector externo es adverso.
Al ser cuestionado sobre la expectativa de crecimiento de 4 por ciento que ha manifestado el gobierno, el profesor investigador destacó la importancia de incrementar la inversión al 25 o 27 por ciento, lo cual depende de que crezca el mercado.
“El mercado no está creciendo porque el gobierno está gastando menos. Entonces, la política económica más que defender a toda costa la austeridad fiscal, debe generar las condiciones de ganancia de mercado para que el sector privado invierta, y así, incrementar la actividad económica”, indicó.
Desde su punto de vista, “para generar un crecimiento de 4 por ciento es necesario cambiar la política económica que nos ha llevado al estancamiento, es decir, se necesita trabajar con gasto público deficitario; el gobierno debe gastar más allá de lo que recauda”.
Insistió en que si el gobierno quiere recaudar más tiene que gastar más, porque si el gobierno no incrementa su ingreso no podrá pagar la deuda, que tan sólo en enero pasado representó 69 mil 905 millones de dólares.
“Entonces vamos a una crisis fiscal… Vamos a un estancamiento, a una recesión económica, y de eso, el gobierno tiene que darse cuenta, la política fiscal debe actuar ya como medida contracíclica”, reiteró.