El domingo, Alfonso Cepeda, dirigente del SNTE, afirmó que los derechos de la maestra están suspendidos debido a que dejó de pagar sus aportaciones.
La maestra Elba Esther Gordillo asegura que sus derechos políticos, ciudadanos, y sindicales están vigentes, por lo que podría participar en los procesos internos para la renovación de dirigencias, que comenzarán en febrero.
“En la democracia se gana con votos. Los maestros y maestras del SNTE siempre han sido ejemplo de democracia sindical”, afirmó en Twitter.
El domingo, Alfonso Cepeda, dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), mencionó que la maestra no puede votar ni ser votada debido a que dejó de pagar sus aportaciones.
“Nuestro estatuto establece que es miembro activo de la organización sindical quien aporta el 1 por ciento de su salario para el sostenimiento del sindicato. Si desde hace años y, particularmente, desde hace 10 meses no se ha entregado esta cotización, pues obviamente no se tienen condiciones para poder participar en este momento“, explicó.
Sin embargo, Cepeda Salas aclaró que si Gordillo Morales paga sus cuotas atrasadas podría participar internamente en la renovación de las secciones sindicales.
“En esta organización sindical hay cabida para todos los trabajadores de la educación sin excepción, a condición, insisto, de que estén al corriente de su cotización sindical… En el momento en que compañeros, compañeras que regresen por haber pedido, por ejemplo, licencia sin goce de sueldo, que hay muchos, que luego se reincorporan y se ponen al corriente con su cuota sindical, recuperan sus derechos sindicales plenamente”, afirmó.
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Cepeda añadió que el SNTE está ejerciendo un verdadero sindicalismo con mayor democracia, con una representación gremial más fuerte, legítima y transparente, dedicada a defender los derechos de sus agremiados, lo que “no tiene nada contentos a grupos que en el pasado ejercieron el liderazgo gremial en medio de una total opacidad, que derrochaban los recursos del Sindicato en proyectos personales, si no es que familiares, haciendo del patrimonio de lucha de los trabajadores de la educación su patrimonio familiar”.