Mel Gibson dirigió y protagonizó Braveheart, en 1995, basada en la historia de la figura de William Wallace. Tuvo un importante éxito y la vida de este soldado escocés volvió a ser reconocida por la sociedad. William Wallace nace en 1270 y dirigió a su país contra la ocupación inglesa del rey Eduardo I de Inglaterra, en lo que fue la primera guerra de Independencia de Escocia.
Este importante guerrero y crucial para la historia de Escocia atacó, en 1296, junto a su tropa de soldados el destacamento inglés destinado en el condado. Pero desafortunadamente fue capturado por las fuerzas realistas que lo llevaron a la cárcel. Pudo escaparse, según dos versiones, por un lado, se dice que una multitud lo liberó de la mazmorra, y por otro se cuenta que su astucia le sirvió para evadirse de la cárcel.
Cuando salió de la cárcel tuvo más fuerza que nunca y enseñó a sus hombres a luchar contra la dominación inglesa para proclamar la independencia de Escocia. Las tropas inglesas ganaron y Wallace fue juzgado y condenado a muerte por traición al Rey.
De igual forma que se hacía con los que contradecían al Rey, lo desnudaron y lo arrastraron por Londres. Y luego fue ahorcado a una altura que no fuese suficiente para romperle el cuello. Su cuerpo cortado en cuatro partes. Y la extremidades de Wallace fueron repartidas por distintas partes de Inglaterra, siendo su cabeza colgada en el puente de Londres para atemorizar a otros enemigos de Inglaterra.
Para el país es un Héroe Nacional y se le conoce como “el corazón valiente de Escocia”. Existe el Monumento Nacional Escocés de Wallace. Está ubicado en Stirling, encima de los campos donde Wallace mandó sus tropas a la victoria en la batalla del Puente de Stirling. En este monumento se explica su historia desde su triunfo en el campo de batalla, hasta la tragedia de su traición, captura y ejecución.
La construcción del Monumento comenzó en 1861, que se abrió a los visitantes en 1869. Está situado en el punto más alto de Abbey Craig, a 91,44 metros por encima del nivel del mar, y mide 67,06 metros de altura. Es uno de los lugares más visitados de Escocia.
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