Stefan Savic capitaneó a la selección de Montenegro en su partido ante Bulgaria, valedero para la Eurocopa de 2024. El equipo del central del Atlético de Madrid está enmarcado en el Grupo G también junto a Hungría, Serbia y Lituania.
Como siempre que está apto lo hace, el jugador colchonero fue una de las piezas clave de su selección. El choque, disputado en el Ludogorets Arena de Razgrad acabó con 0-1 con gol de Nikola Krstović. Por su parte, Savic fue clave con una acción final, en el tiempo añadido en la que literalmente sacó el balón en la misma línea cuando ya se colaba.
Stefan Savic, futbolista del Atlético de Madrid, con la selección de Montenegro.
El jugador del Atlético de Madrid gozó de una oportunidad clarísima en los primeros 45 minutos. De hecho, una de las mejores del combinado ‘Crna Gora’ en la primera mitad. Un saque de esquina botado desde la izquierda de la portería de Naumov acabó con un cabezazo tremendo del colchonero que el arquero búlgaro sacó con una gran estirada.
En el rechazo, el balón volvió a la zona en la que estaba el jugador del Atlético, que intentó remachar la jugada tirándose en escorzo para golpear con el pie, pero lo que hizo fue dar a la cabeza de Antov, que quedó tenido en el suelo. A resultas, el colegiado del partido amonestó a Savic con tarjeta amarilla. Fue justo antes del descanso.
Stefan Savic, futbolista del Atlético de Madrid, con la selección de Montenegro.
Lo cierto es que para él fue un partido intenso. Antes de esa jugada, Despodov le pisó en el área y Savic estuvo un rato tirado con dolor. Tras levantarse le pidió al colegiado que mirase las imágenes del VAR.
Stefan Savic, futbolista del Atlético de Madrid, con la selección de Montenegro.
SAVIC CEDIÓ EL BRAZALETE EN EL DESCANSO
A modo de curiosidad, señalar que el central del Atlético cedió el brazalete a Jovetic en la segunda mitad, cuando el exdelantero de Fiorentina, Sevilla, etc saltó al césped tras el descanso.
El gol que salvó Stefan Savic en la misma línea.
Finalmente, el jugador colchonero se convirtió en el héroe de su equipo cuando se interpuso en el empate de Bulgaria en una postrera jugada. Cuando los locales saboreaban el gol, en una gran jugada colectiva, Savic sacaba el esférico de la línea, lanzándose como un felino. Los compañeros celebraban con el rojiblanco como si hubiese marcado el gol de la victoria porque casi lo era.