El Sevilla empató en su primer amistoso de pretemporada en Corea del Sur ante el Tottenham en la ciudad de Suwon, a 30 kilómetros de Seúl, donde 44.000 enfervorizados aficionados asiáticos vibraron con la calidad del fútbol europeo, así como con su estrella local, Son Heung-min, delantero de los spurs que arrancó la mayoría de expresiones de admiración.
Sin fichajes sobre el campo
El equipo de Julen Lopetegui, después de 9 días de trabajo en Corea, y sin fichajes aún sobre el campo, ya que el brasileño Marcao no ha llegado al mismo nivel de sus compañeros, dio los primeros pasos de la temporada ante un equipo de Champions como el de Antonio Conte, un duelo que enfrentaba al cuarto de LaLiga con el cuarto de la Premier y que estuvo muy equilibrado y en el que los goles llegaron tras el descanso, por medio de Kane y de Rakitic.
El entrenador guipuzcoano, como exige en el primer partido de preparación, no pasó de darle 45 minutos a cada futbolista poniendo un once muy reconocible en una primera mitad en la que tuvo las mejores ocasiones fruto de la presión adelantada de los andaluces ante un rival que va algo más adelantado en su preparación y que disputaba su segundo amistoso. Lo intentó Papu Gómez con un disparo lejano que se fue fuera por poco, aunque las mejores ocasiones las tuvieron Lamela y Rafa Mir en la recta final de este primer acto, con un disparo al palo del argentino y un mano a mano del cartagenero con Lloris que el delantero no supo resolver.
En la segunda mitad, con muchos cambios en los dos equipos y con menos precauciones en las defensas, llegaron los goles. Se adelantó el Tottenham por medio de una gran acción de Son que dejó habilitado a Kane e igualó Rakitic de un gran disparo desde fuera del área.
En la recta final, ambos buscaron el triunfo pero el marcador ya no se movería. El Sevilla vuelve este domingo a España para seguir su preparación en la segunda parte de la pretemporada en Portugal.